La élite de la vela, en Valencia

"Terra Mítica les invita a un desayuno". Jóvenes patinadoras enfundadas en minifalda y camisetas con el logotipo del futuro parque de atracciones recibían con esta oferta a los más de 700 regatistas y curiosos que se dejaban caer ayer por el Real Club Náutico de Valencia, en el primer día de la XI edición del Trofeo Marcial Sánchez Barcáztegui. Desde ayer y hasta el domingo, Valencia concentrará la élite de la vela española en la celebración de la regata que homenajea a la Armada. Un año más, la principal atracción de competición es la participación de Don Juan Carlos al timón del Bribón. "Bonito sitio teneis aquí". Bajo un sofocante poniente, poco después de las 11.00 horas de ayer, Don Juan Carlos salía del yate Fortuna, donde había pasado la noche, y posaba ante la prensa. Protegido por unas gafas de sol y acompañado del empresario catalán José Cusí, propietario del Bribón, el monarca se dirigió hacia el almirante que da nombre a la regata y zarpó. "El Rey me ha dicho que está encantado de volver a Valencia". El octagenario Barcáztegui se mostraba orgulloso de que once años después de la primera edición, su regata se haya hecho un hueco en el circuito nacional. Además del monarca, la edición de este año cuenta con la presencia de la Infanta Cristina, que patroneará el Azur de Puig, y el duque de Palma, Iñaki Urdangarín, tripulante del Costa del Azahar. Junto a ellos, el resto de regatistas repartidos en 53 embarcaciones disfrutarán del mar y del viento hasta el domingo a mediodía. El príncipe Felipe de Borbón se encontraba ayer disputando una regata en Grecia y se espera que hoy esté presente en el Club Náutico en Valencia. Minutos antes, la actividad en el recinto era intensa. A cada paso, miembros de agencias de seguridad privada, agentes de la guardia civil, de la policía nacional, guardaespaldas, escoltas y hasta perros adiestrados escudriñaban cada rincón de las instalaciones del club. Junto a ellos, el personal de servicio retiraba hasta la última colilla para dejar todo a punto. "Estamos a tope", señalaba Vicente Martinez, de 17 años, mientras barría el tramo de carretera que conduce al Fortuna. "Hoy hemos venido todos y nos faltan manos", comenta. De todas las carpas instaladas por los patrocinadores en la zona social de este acontecimiento deportivo, el mayor espacio lo ocupa el que publicita a Terra Mítica, el proyecto lúdico que se ha convertido en una de las principales apuestas del presidente de la Generalitat, Eduardo Zaplana. Junto a la promoción del futuro parque de atracciones de Benidorm, la publicidad institucional se agolpaba sobre los visitantes y participantes. València Terra i Mar de la Diputación, la Ciutat de les Arts i les Ciències, Terra Mítica y la Feria de Muestras Internacional de Valencia competían en tierra con sus carpas y carteles en la zona de recreo de las intalaciones del club. Junto a ellas, el pabellón del desafío español de la Copa América, que recordaba la participación de la Generalitat Valenciana con 400 millones para construir el barco que representará a España en la competición de vela más prestigiosa del mundo. En el mar, de nuevo Terra Mítica se enfrentaba al Costa del Azahar, velero patrocinado por la Diputación de Castellón, y al Desafío Valenciano, que también competía en los dos medios, todos ellos en categoría IMS, clasificación en la que participan los barcos más veloces. Al término del primer día de competición, la victoria fue para el Toro del Puerto, subcampeón el año pasado de la Copa del Rey, la regata más importante que se celebra en España. El Desafío Valenciano, y el Costa del Azahar, ocuparon la segunda y tercera posición, respectivamente, separados por un estrecho márgen.