La Comandancia de Marina abrió el año pasado 318 veces el puente de Carranza
El Puente José León de Carranza, uno de los dos únicos accesos que tiene Cádiz, se alzó 318 veces en 1997 con una duración de entre siete y 15 minutos cada maniobra, en función del tamaño y el tonelaje del buque. Además, estas operaciones dependen de la Comandancia de la Marina, según una respuesta parlamentaria del Gobierno al diputado de Nueva Izquierda Manuel Alcaraz. Es la primera vez que se conoce oficialmente la actividad anual del tramo móvil del puente, inaugurado en 1969.
Además, el Ejecutivo aporta otro dato novedoso: las operaciones dependen de la Comandancia de Marina, que es la que autoriza a los prácticos del puerto de Cádiz o de la Carraca -las instalaciones navales militares de San Fernando-, la salida y la entrada de los buques, tanto civiles como militares. Juan Ortuño, concejal de NI en el Ayuntamiento de Cádiz, criticó ayer esta circunstancia: "Es sorprendente que la infraestructura viaria más importante de la Bahía de Cádiz esté controlada por la autoridad militar. Parece poco razonable". Por ello NI presentará una propuesta en la Cámara baja y otra en el Ayuntamiento gaditano para que la actividad del puente pase a ser controlada por el Ministerio de Fomento. "Es una auténtica sorpresa comprobar cada día nuevos datos que desvelan las servidumbres militares que soporta esta ciudad y esta bahía", señala el edil gaditano. NI resalta además el perjuicio que tienen estas maniobras para los ciudadanos de la Bahía de Cádiz, ya que muchas de ellas se realizan en horas punta. La explicación técnica que ofrece el gobierno es que el puente debe alzarse en ocasiones coincidiendo con la pleamar. NI pedirá que no se permita esa operación en horas punta (de 8.00 a 10.00 y de 14.00 a 16.00 horas) para evitar "el colapso" que se produce. Las estimaciones de esta formación es que cada día hasta 30.000 ciudadanos padecen las retenciones, partiendo de las últimos datos, que cifran en 10.000 los viajes diarios a través del puente y una media de tres ocupantes por cada turismo. "Hay que reformar el sistema que se emplea para el alzado del puente", dice Ortuño, "no parece razonable que queramos hacer una inversión millonaria para un puente paralelo mientras que no intentemos desbloquear los problemas que origina el desconcierto en las operaciones". Y agregó: "Alguien debe aclarar por qué determinado barcos tienen prioridad horaria sobre miles de ciudadanos que van a trabajar".
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