Doble proceso en Francia contra militantes del partido de Le Pen

El Frente Nacional (FN) se sentó ayer simbólicamente, por partida doble, en el banquillo de los acusados en una jornada judicial ilustrativa de las tendencias racistas que anidan en ese partido ultraderechista de Jean-Marie Le Pen. Mientras, el Tribunal de Burdeos declaraba abierto el juicio contra dos ultraderechistas acusados del secuestro y asesinato de un ciudadano judío, la Cámara de lo Penal de Bouches-du-Rhône impuso una condena de 15 años de prisión al militante del FN Robert Lagier, autor de la muerte a tiros del joven francés nacido en las islas Comoras Ibrahim Alí. El mismo tribunal condenó a penas de 10 y dos años de cárcel, respectivamente, a los otros dos militantes del Frente Nacional implicados en los hechos ocurridos la noche del 21 de febrero de 1995 en Marsella cuando colocaban carteles exigiendo la expulsión de los inmigrantes.«Ustedes han sufrido la influencia del partido al que pertenecen y que les habla de invasiones», dijo el fiscal al formular su acusación, en la que reclamó 20 años de prisión para el autor material de los disparos. «Para ustedes, Ibrahim Alí no era un hombre, sino un estereotipo, una abstracción del peligroso extranjero», añadió el fiscal. «No hubo gritos hostiles por parte de Ibrahim Alí y de sus compañeros, no hubo piedras arrojadas ni cuchillos; Ibrahim y sus amigos», indicó el acusador público, «venían de un ensayo de rap y corrían para alcanzar el autobús». Otros dos militantes del FN, Vincent Parera y Philippe Vigneaud, comparecieron ante el tribunal de Burdeos para responder del secuestro y muerte en julio de 1995 de Guy Levy.