Marqués afirma que no admite lecciones de ética y moral de Cascos

El presidente de Asturias, Sergio Marqués, ya recibió la notificación por parte del PP de su suspensión cautelar de militancia, pero no la recurrirá hasta que el partido le explique en qué se fundamenta. Ayer reiteró que no piensa abandonar ni la presidencia del Principado ni el PP y que, por tanto, tampoco va a crear su propia formación, e insistió en su exigencia de un congreso extraordinario, que el partido rechaza. Marqués añadió que no admitirá lecciones de moralidad y de ética del secretario general del PP y vicepresidente primero del Gobierno, Francisco Álvarez Cascos.El líder del PP asturiano, Isidro Fernández Rozada, mantendrá esta semana contactos con todos los grupos de la Junta General (Parlamento regional) para pactar una salida a la situación actual: un Ejecutivo apoyado exclusivamente por cuatro diputados, si bien se les podrían sumar otros tres si el PP, como parece probable, aparta a quienes desde sus escaños expresan su apoyo a Marqués. Sin embargo, no parece que vaya a prosperar el intento de Rozada porque los dirigentes del PSOE y de IU insisten en que debe ser el PP el que resuelva la coyuntura.

A su vez, Marqués reafirma que no dimitirá. Ayer, en Noreña, proclamó una vez más: "Seguiré mientras Dios me dé fuerzas y hasta donde haga falta. Asturias está en el camino de la recuperación y del crecimiento y nadie tiene derecho a romperlo".

También rechazó Marqués con acritud que esté presidiendo un "Gobierno deshonroso", según la expresión utilizada el viernes en Mieres por Cascos. "Cuando alguien de la categoría en muchos aspectos de determinadas personas viene a darme lecciones de moral y ética, no me ocupo de ello", dijo en alusión al vicepresidente.

Asimismo, en contra de lo anunciado por Rozada, Marqués volvió a desmentir que pretenda crear otro partido: "Ésa es una infamia que rechazo y desprecio desde lo más hondo de mi corazón".