Denuncian otro ataque en la cárcel de rapados a insumisos

El Movimiento de Objeción de Conciencia (MOC) ha denunciado que dos insumisos encarcelados en la prisión militar de Alcalá de Henares sufrieron ayer otra agresión a manos de un grupo de presos de ideología neonazi. Las víctimas son Plácido Ferrándiz y Ramiro Paz, ingresados en prisión por desertar una vez incorporados al servicio militar.

Ambos, junto con otros dos insumisos, fueron supuestamente atacados por el mismo grupo el pasado lunes, según hizo público el pasado miércoles el diputado de Izquierda Unida Willy Meyer. Aquel día, unos seis neonazis destrozaron la celda de los insumisos y les golpearon. Entre los supuestos agresores figuraban, según el MOC, dos cabezas rapadas encarcelados mientras cumplían el servicio militar -uno por homicidio en Majadahonda y otro por apuñalar a su novia en la misma localidad-.

Tras este incidente y otro ocurrido el jueves, el Ministerio de Defensa abrió expediente a dos de los militares encarcelados. "El jueves hubo empujones e insultos y un insumiso cayó por las escaleras, pero ni siquiera necesitó ir a la enfermería", señaló un portavoz de Defensa.

Ayer, según el MOC, los insumisos Fernándiz y Paz volvieron a ser atacados. El portavoz de Defensa señaló que desconocía los hechos.

El Defensor del Pueblo

El MOC señaló que, tras los incidentes del lunes, los insumisos habían solicitado a la prisión militar que aumentase las medidas de seguridad, pero que, por motivos "muy sospechosos", ayer las puertas de sus celdas quedaron abiertas, lo que fue aprovechado por los neonazis para atacarles. Las víctimas, según el MOC, fueron trasladadas a la enfermería. "No sabemos cómo se encuentran. Nos han contado que un funcionario ha llegado a ver a un neonazi cuando intentaba autolesionarse", señaló un portavoz de la citada organización.El nuevo ataque llegó poco después de que un asesor del Defensor del Pueblo acudiese al centro militar para investigar la agresión de lunes. Este enviado trató con el director del centro penitenciario y comprobó, según Efe, que era cierta la denuncia de los insumisos. Antes de salir obtuvo la promesa del director de la cárcel de aislar a los agresores y aumentar la seguridad de los insumisos.

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