Vértigo y acoso

El vértigo de lo desconocido ha suscitado en Álava, el escenario electoral más abierto, la hipótesis de que el PNV y EA presenten una lista conjunta al Ayuntamiento de Vitoria. Dos partidos saben lo que es ganar con José Ángel Cuerda, y también lo que es perder sin él. El PNV se quedó con dos concejales de 27 tras la escisión. Siete años después, con Cuerda de vuelta al redil, quien pasa por esa experiencia es EA, con un solitario concejal. Con la anunciada caída de UA, la conjunción del PNV y EA sería un arma considerable frente a las estrategias que diseñan los socialistas y los populares, pero la lista única está descartada. El lastre del PP Los de Carlos Iturgaiz van a sufrir una verdadera agonía para rellenar sus listas en numerosos municipios donde tendrían opciones de sacar concejales, debido a la ofensiva criminal de ETA contra sus cargos electos. La situación, según reconocen en el PP, va a ser especialmente complicada en Guipúzcoa. Las autonómicas y las municipales serán las primeras elecciones de un PP vasco huérfano de Jaime Mayor Oreja, aunque su presencia en ambas campañas no sólo está garantizada sino que es un hecho desde que fuera nombrado ministro del Interior. El Gobierno de José María Aznar y las principales figuras institucionales del PP en España van a intentar paliar ese importante lastre con un arrope continuo a sus candidatos vascos, tanto en las autonómicas como en las municipales. En el caso del PSE, la renovación que supuso la marcha de Ramón Jáuregui a la Ejecutiva Federal del PSOE será la prueba de fuego en las elecciones autonómicas de octubre, pero no parece que pueda afectar a las municipales, ya que los candidatos a alcalde en ciudadades de más de 50.000 habitantes se elegirán por el sistema de primarias. De momento, en Vitoria y San Sebastián Jesús Loza y Odón Elorza son aspirantes firmes, pero en Bilbao todavía no existe nunguna apuesta segura.