TURBULENCIA SEXUAL

Los pasajeros no podían creer lo que estaban viendo cuando, la semana pasada, una pareja que viajaba a bordo de un vuelo de South African Airways (SAA) de Londres a Johanesburgo comenzó a mantener relaciones sexuales en medio de la cabina, relataba ayer el surafricano Sunday Times. La pareja, un blanco y una india, ambos de unos 40 años, ya subieron al avión con un «humor jovial» y bebieron copiosamente hasta la medianoche, cuando los auxiliares de a bordo se negaron a servirles más bebidas alcohólicas, según uno de los pasajeros. «Y ahí fue cuando comenzó el real cachondeo», dijo el testigo, que señaló que la pareja, actuando como si estuvieran solos y sin ninguna vergüenza, realizó sexo oral primero, con la mujer arrodillada en el pasillo frente al hombre, y luego el coito, en la «posición del misionero», sobre uno de los asientos reclinados. Una de las azafatas, que no sabía cómo intervenir para detener la «turbulenta situación», llamó al comandante de la aeronave, quien increpó a la pareja y la obligó a separarse y a «ajustarse los cinturones», comentó risueñamente otro de los pasajeros. Según este testigo, cuando el piloto les habló, la mujer dijo con toda naturalidad: «¡Oh!, es el capitán», a lo que su compañero, mirando por encima del hombro y sin detener su actividad sexual, agregó: «¡Ah!, ¿qué tal, capitán?». El comandante de la aeronave se negó a comentar el incidente, pero otro de los tripulantes dijo que la pareja sólo se separó cuando el piloto amenazó con hacerlos detener por indecencia pública al llegar a Johanesburgo. Que se sepa, no llegaron a avisar al presidente Nelson Mandela, pero ha debido de faltar poco.