Amplia respuesta de público en los conciertos de los jóvenes europeos

VIENE DE LA PÁGINA 1 Un responsable de la Unión Europea de Escuelas de Música (EMU), que desde 1985 impulsa el festival cada tres años en una ciudad diferente, aseguraba ayer que la respuesta del público en los cientos de conciertos celebrados desde el pasado lunes en toda Cataluña es sensacional. La Hyvinkäa Chamber Orchestra de Finlandia, por ejemplo, congregó a 1.200 personas en el auditorio del Ateneo Municipal de Vilafranca del Penedès. Ayer, numerosos transeúntes que paseaban por el centro de Barcelona se detenían sorprendidos y no escatimaban tiempo a la hora de seguir los conciertos que ofrecían los jóvenes. Aunque el jueves en la plaza de Catalunya un extranjero avispado, ajeno al festival, aprovechaba la ocasión pasando el sombrero cada vez que una big band finalizaba su actuación, el único incidente serio lo vivió antes de llegar a España el único conjunto de Estonia que participa en el festival, el Ensemble Keila, cuyos miembros fueron atracados en Francia, en una estación de servicio de una autopista, y llegaron a Girona, su punto de acogida, sin dinero ni ropa, pero con los instrumentos a salvo. Una vez repuestos, actuaron en la ceremonia inaugural de miércoles en el Palau Sant Jordi. Visitas culturales Más de 2.000 músicos se desplazan a diario a Barcelona desde los diversos puntos de Cataluña donde se hallan en las escuelas de acogida. Llegan por la mañana a la capital catalana en autocar, se citan en el Mercat del Born y desde allí salen a visitar Barcelona siguiendo cualquiera de los seis itinerarios culturales organizados, de tres horas de duración cada uno. Después actúan en la ciudad y, tras la cena, vuelven a los albergues y casas donde se alojan. Ordenadamente, el centenar de miembros de la Tysvér Musikkskoleorkester de Noruega, con inequívoco aspecto de haber tomado el sol en abundancia, se dirigen a la plaza de Sant Jaume, uno de los escenarios donde actúan. Aunque acaban de comer un menú a base de arroz con salsa de tomate y varitas de merluza, cocinado en el propio Mercat del Born, salen bien provistos de naranjas y plátanos. "La comida está bien, pero algunos nos quedamos con hambre y completamos la dieta con fruta y los bocadillos que haga falta", aclara un fornido trompetista de una big band alemana. Un total de 12 cocineros y 18 camareros preparan y sirven, dos veces al día, menús para 5.500 comensales. "A diferencia de otras empresas de catering que sirven platos precocinados, ofrecemos comida casera cocinada al momento en el propio lugar", comenta Robert Comadrán, gerente de Gastronomía Unión. El despliegue de orquestas sinfónicas, bandas, corales y grupos de cámara, de jazz, pop, rock, blues y música popular continuará hoy en 40 escenarios del centro de Barcelona y el festival será clausurado por la noche con una gran fiesta en el Moll de la Marina, precedida por una gigantesca paella para 10.000 comensales.