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Los partidarios de Estrada temen que exista fraude en las elecciones filipinas

Los partidarios del virtual ganador en las elecciones celebradas el lunes en Filipinas, Joseph Estrada, todavía creían ayer, tras el lentísimo recuento oficial de los votos, que se puede esconder la posibilidad del fraude. Según el último sondeo de la acreditada agencia Social Weather Station, Estrada se situaba en primer lugar con un 38,8% de los votos, seguido por el candidato oficialista, José de Venecia, con un 16,4%. A cuatro días de las presidenciales, sólo se había escrutado un 5,75% de los votos.«Nos tememos que algo se está tramando... Todo va muy lento... Si de repente José de Venecia se sitúa en el primer lugar, la gente no lo aceptará», dijo el senador Orlando Mercado, jefe de la campaña electoral de Estrada. «El partido gobernante se resiste a reconocer su derrota y la victoria de Estrada. Quieren dar la impresión de que somos nosotros los que vamos a hacer fraude, pero eso suena ridículo, porque son ellos los que tienen todos los medios para cometerlo», añadió Mercado.

El presidente saliente de Filipinas, Fidel Ramos, también expresó su confianza en que el recuento pueda hacerse un poco más rápido. «Todos estamos desesperados por el lentísimo recuento, espero que se agilice porque es lo que todo el pueblo quiere», dijo antes de reunirse ayer con De Venecia, el candidato que él propuso.

El martes pasado, el arzobispo de Manila, cardenal Jaime Sin, instó a los filipinos «a mantener la paciencia y la vigilancia» y no dejarse influir por las «fuerzas malignas», en referencia a los sondeos que situaban a Estrada como el ganador virtual. El cardenal, que desempeñó un papel decisivo para derrocar al dictador Ferdinand Marcos durante la revolución de 1986, ha reiterado que si Estrada llega al poder «el país puede hundirse».

Por su parte, el ministro de Defensa, Fortunato Abad, rechazó ayer la posibilidad de que se produzca un golpe militar si Estrada se impone en el recuento de votos. «No creo que haya otra intentona desestabilizadora. Creo que continuará el camino de la democracia responsable que tenemos», dijo Abad, general retirado, en relación a las especulaciones que apuntan a la posibilidad de un golpe militar como el que se frustró en 1986, cuando subió a la presidencia Corazón Aquino.

En Sibuco, en la isla de Mindanao, unos 840 kilómetros al sur de Manila, dos personas resultaron muertas y 15 con heridas de diversa consideración al estallar una granada lanzada por un desconocido, según informó la policia.

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