Los forestales de Buñol piden más rapidez en la extinción de fuegos

Los agentes forestales de la Hoya de Buñol han mostrado su malestar por lo que consideran falta de rapidez de respuesta en el inicio de las tareas de extinción de algunos de los últimos incendios en la comarca. Tal es el caso del incendio del pasado domingo en la partida del Cerro de Tabarla, en el término de Yátova, donde se quemaron unas 15 hectáreas de monte arbolado, "aunque podría haber sido un desastre similar al ocurrido en 1991, en el que la comarca perdió 15.000 hectáreas y donde todos los términos municipales se vieron afectados, lo que supuso el mayor desastre ecológico que se recuerde en la zona", afirma Vicente Albuixech, agente forestal de Siete Aguas. Los agentes, no obstante, no dejan de reconocer que al final se actuó coordinadamente. Según el jefe de la zona forestal de Yátova, Pedro Rosel, "una vez que estuvo establecido el puesto de mando avanzado, la coordinación funcionó correctamente". "Lo grave de la situación del incendio del pasado domingo en Yátova", continúa Rosel, "estuvo en que pasaron más de tres horas [de las 16.15 hasta las 19.30 horas] desde que se inició el incendio hasta que quedó establecido el puesto de mando y comenzaron las tareas de extinción con el grueso de los medios".