Conde dice que Air Products, pagó para librarse del chantaje de Hachuel

, Mario Conde declaró ayer que los directivos de la multinacional Air Products mintieron en la Operación Carburos -presunta estafa de 1.344 millones de pesetas-, ya que pagaron conscientemente el dinero, en 1990, al financiero Jacques Hachuel, y no a Banesto, para librarse de la amenaza que éste representaba. Como ya hizo con el ex presidente Adolfo Suárez en la operación de los 300 millones y con la familia Serratosa en las cementeras, el ex banquero echó la culpa a los directivos Ronaldo Sullam y James McMahan. Dijo que no conoció los detalles de la operación, que negoció Arturo Romaní.

"¡Eso fue un arreglo! ¡Vamos hombre!", dijo Conde a preguntas del fiscal Luis López Sanz. "¡El señor Hachuel va a quedarse sin ganar dinero! ¡Conozco algo al señor Hachuel para saber que eso no puede ser!".Por momentos, la declaración del ex banquero volvió a ser, como ya es normal, un soliloquio. La pregunta que se le suele hacer es para él sólo un pretexto formal. Su respuesta es un largo diálogo consigo mismo, donde aflora lo que lleva preparado. Aderezado, eso sí, con números. Es lo que se llama una defensa mercantil. No penal.

"Yo no conocí los hechos, pero si quiere puedo darle mi interpretación a partir de lo que he conocido después, en 1994", se ofrece Conde, como si no fuera con él.

Según su interpretación, pues, Air Products necesitaba disfrazar (caracterizar, dijo) el pago de 1.344 millones en abril de 1990 como si se tratase de una prima o pago de una opción por el 5,9% del capital de Carburos Metálicos. Pero, no. No fue, según la interpretación de Conde, eso. Según asegura, lo que se pagó fue otra cosa: el retiro de la amenaza que representaban unos warrants emitidos en 1989 por Banesto u opción de compra sobre el 18% del capital de Carburos Metálicos.

Banesto, pues, emitió esos warrants, según una idea de Hachuel, y se los quedó una sociedad relacionada con este último, Euris. Ahora bien, Conde interpreta que al llegarse a un acuerdo entre Banesto y Air Products para estabilizar Carburos, en febrero de 1990, Banesto recompró los warrants a Euris. Éste fue el arreglo. Para que éstos no fuesen a manos competidoras, Air Products pagó 1.344 millones a Hachuel en Suiza. Los documentos de la época esto es, 1990, cuando todavía no se podía aventurar una querella criminal- y las declaraciones de los ejecutivos de Air Products ante el juez niegan esta versión.

Hachuel, dicen, no intervino para nada. Y pagaron, según los documentos y de acuerdo con su declaración, allí donde Romaní le dijo al ejecutivo Ronaldo Sullam, vicepresidente para Europa: una transferencia a nombre de un abogado en Suiza. Después se supo. Era Peter Widrner. Abogado de Hachuel.

"¡Vamos, hombre, Romaní hablando por teléfono con Sullam!", dice Conde al interpretar la operación. Al término de sus soliloquios con el fiscal López Sanz, Conde suspiró: "Estoy cansado".