El Congreso penalizará a los tránsfugas en su nuevo reglamento

El nuevo reglamento del Congreso de los Diputados penalizará el abandono de cualquier diputado del grupo en el que se integre inicialmente. Aunque la ponencia que debate el reglamento no llegó ayer a una redacción definitiva, hay acuerdo fundamental en que el diputado tránsfuga tendrá que integrarse en el Grupo Mixto pero no como miembro de pleno derecho, sino en calidad de "diputado no inscrito" y verá recortados sus derechos parlamentarios -cuotas de intervenciones en la Cámara y económicos-.

La ponencia acordó modificar el nombre de las llamadas hasta ahora proposiciones no de ley, es decir, las que no tienen carácter legislativo que pasarán a llamarse resoluciones.

Álvaro Cuesta, diputado socialista, explicó que su grupo, junto a Izquierda Unida y Coalición Canaria, propone un sistema para que los miembros de las altas instituciones del Estado que son elegidos por el Parlamento tengan que someterse a algún tipo de control previo por parte de la Cámara.

Manuel Núñez, en nombre del Grupo Popular, respondió que la propuesta hay que estudiarla detenidamente porque el examen parlamentario no debe diluir la responsabilidad política del grupo que proponga a cada candidato.

A propuesta del Grupo Socialista se aceptó que si la Cámara no responde en el plazo de 60 días a una petición de suplicatorio para proceder judicialmente contra un diputado, se entenderá que el tribunal queda autorizado para proceder contra él.

También propusieron los socialistas que, al menos una vez al año, el boletín oficial de las Cortes publique el registro de las actividades de los diputados.