El precio de la paz en el Ulster

Los Gobiernos británico e irlandés han dejado claras las bases de su acuerdo: Irlanda del Norte seguirá formando parte del Reino Unido en un futuro próximo, pero habrá adaptaciones constitucionales que formalizarán los lazos entre el norte y el sur y crearán una nueva Asamblea. ( ... ) Así, habría referendos en el norte y en el sur de Irlanda para ratificar el plan, no más allá de mayo, y terminaría un conflicto de 28 años de duración. Que las cosas discurrieran así de fácilmente no era lo más probable. Pero dos recientes asesinatos, al parecer obra del IRA, han provocado una crisis que amenaza todo el proceso de paz. Como todas las partes que se sientan a negociar ( ... ) se han comprometido a alcanzar un acuerdo por medios exclusivamente pacíficos, Londres y Dublín apenas tenían otra opción que la de apartar al Sinn Fein. De lo contrario, se estaría haciendo del asesinato una táctica negociadora más. Pero la ausencia del Sinn Fein aumentaría el peligro de que el IRA abandonara la tregua. Los atentados se reanudarían o, más exactamente, se intensificarían, ya que incluso la tregua se ha visto salpicada de asesinatos. Quienes siempre se opusieron a hablar con terroristas aprovecharán la ocasión para recordar que traer al IRA. a las conversaciones fue un error. Pero excluir definitivamente al Sinn Fein, y no solamente apartarlo hasta que cesen de nuevo los atentados, sería un error garrafal. ( ... ) 21 de febrero