Pleno apoyo de la oposición a la oferta de autonomía para Gibraltar

Todos los grupos parlamentarios apoyaron ayer sin fisuras la oferta, formulada el pasado mes de diciembre por el Gobierno español, de un estatuto de autonomía especial a Gibraltar, que incluiría un periodo de co-soberanía del Peñón con el Reino Unido. El ministro de Asuntos Exteriores, Abel Matutes, que informó ayer a la Comisión de Asuntos Exteriores del Congreso de los Diputados, afirmó que Gibraltar no tiene viabilidad económica al margen de España, que podría exigir un "control estricto de las normas de control comunitario" sobre los negocios financieros del Peñón.

Matutes presentó ayer la zanahoria ofrecida a los gibraltareños sin ocultar que, en caso de que la oferta sea rechazada, también existe la posibilidad del palo. Al diputado socialista Rafael Estrella no le pareció muy conveniente la advertencia del ministro, al que reprochó una anterior declaración en la que se mostraba dispuesto a "apretar las tuercas" a los gibraltareños, si se empeñan en bloquear el diálogo entre Londres y Madrid. Matutes, a preguntas del diputado socialista, señaló que está dispuesto a entrevistarse con el ministro principal de Gibraltar, Peter Caruana, aunque no precisó fecha. Fuentes diplomáticas descartaron, sin embargo, que esta reunión se produzca pronto y apuntaron que antes podría haber un encuentro con altos cargos del Ministerio de Asuntos Exteriores.El ministro explicó, a grandes rasgos, la propuesta entregada en diciembre al ministro británico de Asuntos Exteriores, Robin Cook, y se mostró esperanzado de que la propuesta sirva de base para una negociación posterior. Matutes no quiso, sin embargo, pecar de optimista y reconoció que el proceso será "largo y difícil".

La diplomacia británica, que parece partidaria de mantener indefinidarnente la situación actual, mantiene que no puede negociar nada que vaya contra la voluntad de los gibraltareños, ausentes desde hace años de la mesa de negociaciones, ya que no se les reconoce como una tercera parte en las reuniones. La próxima ronda de negociaciones entre Londres y Madrid estaba prevista para el próximo mes de marzo o abril, pero a petición del Reino Unido, que ocupa este semestre la presidencia de la Unión Europea, ha quedado pospuesta para final de año.

La oferta española -que incluye un estatuto de autonomía del máximo nivel, con tribunales de justicia propios, nacionalidad opcional, régimen fiscal propio, y un periodo de co-soberanía con el Reino Unido que ejercería como garante durante una serie de años de las ventajas ofrecidas- no es indefinida. Matutes, que no es partidario de fijar plazos, señaló, sin embargo, que España no permitirá que se le intente desviar de sus objetivos, Y en caso de un estancamiento de las -negociaciones, advirtió, España está en condiciones de extremar los controles sobre la colonia británica.

"No estamos en una fase de aplicar esas restricciones, sino de demostrar nuestra buena fe y explicar el status que ofrecemos a los gibraltareños" añadió.

Todos los grupos de la oposición, en el marco de un apoyo global al Gobierno, exigieron al ministro que fuera firme frente a algunos abusos que cometen las autoridades del Peñón con los pescadores de la zona, y reclamaron la utilización conjunta del aeropuerto de Gibraltar como un medio de mejorar la economía de la comarca.