David Byrne aboga por el eclecticismo

David Byrne, el insigne alquimista que hoy convoca a los curiosos a su concierto en La Riviera, es, sobre todo, un personaje inquieto que ha buceado en las músicas que le eran lejanas, por sonido y geografía, para adaptarlas a los tiempos modernos de una manera magistral. Con Talking Heads, grupo que lideró durante los setenta y ochenta, ya enseñó su genio con esas composiciones peculiares en las que transgredía el punki neoyorquino. Videos conceptuales y audaces, partituras para películas o exposiciones fotográficas fueron dejando clara la personalidad de este artista total nacido hace 46 años en Escocia y afincado en los EE UU. Este admirador de Camarón o El Lebrijano, vuelve a la carga con Fee-lings, el ecléctico y sabroso disco que estrena en Madrid, una ciudad que visita con frecuencia y no sólo para actuar.

David Byrne, hoy en La Riviera (paseo Bajo de la Virgen del Puerto, s/n; metro Puerta del Ángel), a las diez de la noche, 3.000 pesetas.