Ruiz-Gallardón apoyó en octubre el trazado del tren veloz que ahora quiere cambiar

El Gobierno de Alberto Ruiz-Gallardón ha cambiado de vía dos veces en seis meses. En julio pasado, el Ejecutivo regional propuso un trazado para el tren veloz a Valladolid que salvaba los espacios naturales mediante un túnel de 24 kilómetros. Fomento rechazó esta alternativa y eligió otro diseño, aceptado el 15 de octubre por el equipo de Ruiz-Gallardón. La unión de alcaldes del PP, IU y PSOE contra el plan de Fomento ha conseguido que el Gobierno regional vuelva a defender su antigua propuesta, más cara pero menos peligrosa para el medio ambiente.

Ruiz-Gallardón respaldó ayer, en conferencia de prensa, el trazado que elaboraron los técnicos de la Comunidad de Madrid en julio, el mismo trazado al que había renunciado el Gobierno regional en octubre tras aceptar la propuesta del Ministerio de Fomento.La línea regional (67 kilómetros) plantea un solo túnel (24 kilómetros) que atraviesa la sierra desde Soto del Real hasta La Granja. El proyecto de Fomento, de recorrido más largo (110 kilómetros), dibuja tres túneles (32,5 kilómetros) que, junto a otros 14 kilómetros de vía a cielo abierto, cruzan el valle del Lozoya.

Este último recorrido ha conseguido unir a alcaldes de todas las ideologías, a asociaciones ecologistas y a los grupos parlamentarios de la oposición (IU y PSOE) en un frente contra el Ministerio de Fomento. Tras la irrupción de esta triple alianza contra el tren, Ruiz-Gallardón tomó ayer la iniciativa y resucitó la batalla por un trazado menos agresivo.

El presidente regional recuperó su discurso del verano pasado y su alternativa del macrotúnel por "el beneficio ecológico que comporta". Ruiz-Gallardón cifró en 10.000 millones de pesetas el sobrecoste que supondría ejecutar el trazado dibujado por los técnicos regionales. "Confío en que Fomento valorará más el coste ambiental que el económico a la hora de decidir el trazado definitivo".

Cambio de criterio

Cuando un periodista le preguntó por el cambio de criterio del Gobierno regional en este asunto, Ruiz-Gallardón lo negó: "Cambio, no", aseguró. "La postura de la Comunidad de Madrid ha sido la manifestada mediante un documento muy elaborado, que es una propuesta muy avanzada y estudiada y que está a disposición del Ministerio de Fomento. No ha habido otra postura de la Comunidad, lo que querernos es que se haga el tren con el menor impacto posible, y cuando se nos dijo que la mejor propuesta era la del Ministerio de Fomento, intentamos hacer una alternativa en la que pudiéramos aportar nuestros conocimientos para su viabilidad".A Ruiz-Gallardón le falló su servicio de documentación o su memoria. El 16 de octubre de 1997, el consejero de Obras Públicas, Luis Eduardo Cortés, reveló en el pleno de la Asamblea que el Gobierno regional había aceptado el trazado elegido por Fomento. "Al margen de la propuesta que nosotros hicimos en un principio, mantuvimos una postura clara: apoyaríamos aquella propuesta de trazado que nos presentara el ministerio [de Fomento], y lo hacíamos en aras de conseguir una rápida decisión para la puesta en marcha de este proyecto. Así se hizo, y en la reunión que se tuvo ayer [15 de octubre], con representantes del Ministerio de Fomento, de Renfe y de la Comunidad, se llegó a un acuerdo".

La respuesta de Cortés a la pregunta del diputado socialista Armando Martínez no dejaba espacio para la duda: "Al final, el trazado de Fomento tiene 32,5 kilómetros de túneles; por tanto, sí se han salvaguardado, sí se han atendido todas las prescripciones que el consejero y la Consejería de Medio Ambiente nos habían transmitido. Yo creo que no nos queda más que alegrarnos todos, porque, por fin, este proyecto se pone en marcha".

El PSOE sacó ayer conclusiones: "Cuando Ruiz-Gallardón anuncia buenas noticias sobre el trazado tiene el mismo crédito que cuando, dice que no ha cambiado de postura".