Aznar y Pujol, matrimonio sin amor

Nunca fue un acuerdo que viniera del cielo, pero el enlace entre nacionalistas catalanes y conservadores castellanos ( ... ) está resultando sorprendentemente duradero. Pese a las constantes trifulcas, los socios han acordado que Aznar lleve a término su primer mandato. Ello acaba con las especulaciones sobre elecciones anticipadas, da a Aznar la oportunidad de consolidarse e incrementa las posibilidades de que su partido conservador vuelva a ganar. Como buen matrimonio de conveniencia, las razones para seguir juntos son sobre todo económicas. Ni Aznar ni el presidente regional de Cataluña quieren disgustar a los votantes perjudicando a la economía, cuando España se halla en el buen camino para entrar desde el principio en la moneda europea. (...) La economía española va bien, pero Aznar es aún vulnerable (...) al problema del paro. (...) Además, Aznar teme que el electorado sea voluble; algunos han llegado a respetarle, pero son pocos los que lo quieren. (...) Tampoco es que haya mucho para elegir: los socialistas se encuentran desarbolados por los escándalos de corrupción; aun así, muchos españoles todavía comparan a Aznar desfavorablemente con Felipe González. Aznar piensa que el tiempo está de su lado. Como González ante que él, ha colocado a amigos en puestos clave en los medios, la burocracia, los bancos y las grandes empresas, con cuya influencia espera reforzar su posición. (...) 24 de enero.