El pleno de Nuevo Baztán termina, a puñetazos
El pleno extraordinario celebrado ayer en Nuevo Baztán, una localidad de 3.000 habitantes situada a 40 kilómetros de Madrid y gobernada por el PP, acabó a puñetazos.El responsable de la Federación de Servicios Públicos de UGT en la comarca del Henares, lsaac Ballesteros, fue el peor parado. Había acudido al pleno para protestar contra la moción del PP, aprobada finalmente, para suspender por tres meses de empleo y sueldo a la secretaria-interventora del Ayuntamiento.
Esther Zabala, edil socialista, asegura que, tras debatirse este polémico asunto, empezaron a insultarla algunos amigos de los ediles del PP y se originó una reyerta en el salón de plenos. Allí estaban, además de seis concejales de la corporación, otros 130 invitados.
En el tumulto, Esther Zabala vio cómo un hijo de Rafael Gálvez, edil del PP, "golpeaba con un puño americano al sindicalista".
PASA A LA PÁGINA 3
Sorpresa en el cuartel
UGT denuncia que un edil del PP agredió a un sindicalista
La edil socialista Esther Zabala también presentó una denuncia en el cuartel de la Guardia Civil de Campo Real. Allí se encontró con una sorpresa: "Cuando llegué me crucé con un coche en el que iban la mujer del concejal del PP y su hijo. Supongo que venían de presentar una denuncia por lo ocurrido. Cuando salí del coche, alguien me agarró del pelo y me agredió. Era la mujer de Rafael Gálvez". El secretario general de los socialistas madrileños, Jaime Lissavetzky, también se quejó del comportamiento antidemocrático de algunos ediles del PP. EL PAÍS intentó durante toda la tarde, sin éxito, conseguir la versión del concejal del PP. La Delegación del Gobierno tampoco informó sobre lo ocurrido.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.