2.000 jóvenes segovianos viajan cada día a la capital

La posibilidad de contar con una terminal del tren veloz Madrid-Valladolid próxima a Segovia, con el fin de que la ciudad pueda beneficiarse de esta moderna infraestructura, ha sido una reivindicación constante por parte de instituciones políticas, empresarios, sindicatos y otros colectivos.No en vano se trata de una contrapartida, si se tiene en cuenta que este trazado divide en dos a la provincia segoviana, afectando al medio ambiente de zonas de sierra y de pinares. En la actualidad no existe transporte ferroviario entre Segovia y Valladolid, al encontrarse cerrada la línea hasta Medina del Campo, y el trayecto en tren a Madrid tarda en cubrirse alrededor de dos horas. Siempre y cuando no ocurra como el jueves pasado, cuando unas 30 personas se quedaron plantadas en la estación, a las 6.55 de la mañana, porque el hielo había obligado a suspender el servicio.

Pero no será por falta de clientes, porque, aparte de quien acude a realizar gestiones o compras, la asociación de estudiantes universitarios Horizonte Cultural se encarga de organizar el transporte por autobús de más de 2.000 jóvenes que se desplazan diariamente para estudiar en facultades madrileñas.

La llegada del tren de alta velocidad, que en su punto más próximo a Segovia se producirá cerca de la localidad de Tizneros, a menos de tres kilómetros de la localidad, ha sido entendida por las fuerzas políticas y sociales como un elemento de progreso en una ciudad que posee en el turismo una de sus mayores fuentes de ingresos.

Hay informes que no descartan la posibilidad de que el nuevo ferrocarril provoque un crecimiento de la población en torno a los 30.000 habitantes en 10 años. Son muchos los que podrían plantearse fijar su residencia en Segovia, aunque el centro de trabajo se encuentre a 90 kilómetros de distancia, pero a poco más de media hora de reloj.