Pendientes de negociar la paz

Las delegaciones de las dos Coreas estuvieron una al lado de la otra durante el consejo de delegados de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja celebrado entre el 20 y el 26 de noviembre en Sevilla, pero prefirieron aplazar para mejor ocasión abordar el problema de la hambruna. "Nos limitamos a intercambiar frases de cortesía y nada más. Nosotros teníamos la intención de sacar el tema y, en concreto, el de la reunificación de familias separadas, que afecta a 10 millones de personas. Fue bastante decepcionante", declara el presidente de la Cruz Roja surcoreana, Chung Won Shik. "Cuando insistí a mi colega norcoreano me dijo que no estaban todavía preparados. Tal vez están esperando el inicio de las conversaciones de paz para reanudar los contactos con nosotros". Las negociaciones, en las que además de los Gobiernos surcoreano y norcoreano participarán Estados Unidos y China, comenzarán el próximo día 9 en Ginebra. El objetivo final es convertir el armisticio todavía vigente tras la guerra civil (1950-1953) en un tratado de paz permanente.Estas negociaciones rebasan las exigencias que ambas partes se marcaron en 1991 con un acuerdo de compromiso de buena vecindad. "Se mueven siempre por razones tácticas", dice Chung Won Shik, que negoció personalmente con Pyongyang ese pacto. "Tal vez en esta ocasión piensan que las negociaciones les reportarán beneficios prácticos".