Detenidos tres médicos y un biólogo en Italia por vender esperma infectado

La alarma se ha encendido en toda Italia. Una investigación desarrollada por la fiscalía de Florencia se saldó el pasado viernes con la detención de tres médicos y un biólogo del Centro Florence, de Florencia, especializado en técnicas de fecundación artificial. La acusación que pesa sobre los cuatro detenidos es la de "intento de epidemia" y, de demostrarse, la sentencia sería de cadena perpetua.

La Fiscalía les considera presuntos responsables de la venta a clínicas de inseminación artificial en todo el país de unas mil dosis de espermatozoide infectado con el virus de la hepatitis y otros virus no especificados. La fuente contaminante fue un obrero florentino de 37 años, que entre 1993 y febrero de este año realizó un total de 42 donaciones de semen al Centro Florence, de las que han salido no menos de mil dosis vendidas por toda ltalia al precio de unas 30.000 pesetas por dosis.Los primeros indicios sospechosos que apuntaron hacia la clínica florentina en marzo pasado han quedado estremecedoramente confirmados por los resultados policiales obtenidos a raíz de la denominada Operación Cigüeña, una investigación en la que el cuerpo de carabineros especializado en delitos sanitarias ha descubierto con estupor cómo la clínica, de alto nivel científico, había aceptado donaciones de semen infectado.

Más tarde la clínica, según los investigadores policiales, camufló la ficha médica del donante, haciendo que apareciera a ojos de los centros compradores como un individuo perfectamente sano. En el caso de otros donantes, los carabineros comprobaron que faltaban los datos clínicos.

En su afán de producir material de exportación para los centros de inseminación artificial italianos, el Centro Florence había sometido a un peligroso tratamiento con fármacos a un par de mujeres para aumentar su producción de óvulos. Un tratamiento que, según los expertos, puede llegar a provocar una menopausia precoz.

Protagonistas

Los detenidos son, un prestigioso ginecólogo, Luca Mencaglia, de 43 años, que figuraba como titular del centro; la ginecóloga Rita Guidetti, de 41 años; y el doctor Francesco Bertocci, de 36 años. El cuarto implicado, el anestesista Salvatore Di Dona, de 59 años, permanece bajo arresto domiciliario. Otros ocho especialistas del centro de Florencia están siendo investigados por la policía.La legislación italiana prevé una serie de controles para el semen donado, tan severos como los que se realizan con las donaciones de sangre a partir del descubrimiento del virus del sida

Se exigen, por consiguiente, pruebas especiales para determinar la presencia del virus del sida, de la hepatitis B y C, además de verificarse la ausencia de otras infecciones sexuales de menor importancia. Por si todo ello fuera poco, el líquido seminal debe pasar una cuarentena de 180 días antes de ser utilizado, una vez que el donante ha sido sometido a un segundo análisis en busca de posibles anticuerpos del virus de inmunodeficiencia adquirida.