Los Foo Fighters luchan contra su descomposición

Dave Grohl es algo más que un superviviente de Nirvana. Se ha visto obligado a actuar como socorrista. Como líder de su grupo, Foo Fighters, ha tenido que luchar desde el principio con una serie de deserciones que lo han obligado a recomponer casi totalmente la banda que grabó The colour and the shape. "La vida en la carretera es muy dura y no todos lo resisten. Pero este grupo es mi vida y estoy dispuesto a sacarlo adelante como sea", dijo ayer Grohl, antes de su actuación en Madrid. Hoy cierran su gira española en Bergara (Guipúzcoa).

Dave Grohl podría ganar el premio a la simpatía entre los músicos de rock. Posiblemente no se deba a su mal carácter el que dos de los otros tres componentes de Foo Fighters le hayan dejado plantado durante la grabación del disco -el batería William Goldsmith- y a punto de empezar la gira europea -el guitarra Pat Smear- "Lo de William fue porque durante la grabación tanto él como nosotros nos dimos cuenta de que no estaba preparado. Tuve que grabar la batería de nuevo y él mismo decidió marcharse", explica Grohl. "Luego vino Taylor Hawkins, a quien yo ya conocía, y se ha quedado. Para nosotros ha resultado mucho mejor. Taylor es realmente un batería extraordinario, es mucho mejor que William y que yo mismo".Pero ahí no terminaron las dificultades. "Tres días antes de salir de gira, mientras ensayábamos, Pat Smear también se rajó. No quería ir a Europa y prefirió quedarse para hacer unos programas de televisión. Nos quedamos de piedra. Él había llegado a ir de gira con Nirvana, pero sólo durante cuatro meses. Nuestro ritmo de actuaciones es mucho más fuerte y decidió no seguirnos. Vino Franz Stahl y luego tuvimos que esperar a que él estuviera listo para seguir adelante", aclara.

"Una banda como la nuestra necesita un compromiso total. Estamos siempre de gira, más que ninguna otra banda que yo conozca, más que Rage Against The Machine, más que Prodigy. No tienes hogar, novia, esposa, ni familia. Te conviertes en algo así como un vaquero, alguien sin centro. Y para mí la banda es mi vida, mi creación y estoy dispuesto a cualquier cosa para conservarla", insiste Grohl.

El 'grunge' como insulto

Pese a la evidente deuda que aún arrastra hacia el sonido de Nirvana, la palabra grunge le suena a Grohl como algo ajeno y casi insultante. "¿Qué es el grunge? Se puede decir que Pearl Jam, Soundgarden, Alice in Chains y Nirvana lo eran, pero son todos muy distintos. Al final lo único que cuenta es el rock. El grunge fue sólo el rock de principios de los 90. Lo de grunge incluso llegó a parecernos ofensivo, era demasiado general. Hasta Prodigy hace rock, aunque no tenga batería y guitarra. ¿Son U2 grunge? U2 es más pop, pero Nirvana también era algo pop", afirma GrohI. Sin embargo, no duda en responder si se siente más cerca de U2 que de Nirvana: "De Nirvana, por supuesto", admite sonriente.Foo, Fighters han sido teloneros de Prodigy en un par de ocasiones. "Me encanta la música que hacen", afirma Grohl. "Muchos se asustan de las pintas de Keith, Maxim y Leeroy. Pero Liam Howlett, que programa la música, es el mejor. Es uno de los pocos Dj's que entienden el funk, el swing y los arreglos de rock. Sabe lo que es el soul blanco".

Respecto al futuro, Foo Fighters no se ve con el mismo ritmo de vida. "Nos apetece metemos en el tercer álbum y creo que será algo distinto. Cada uno de los temas será diferente y, sobre todo, algo que no nos lleve a repetir lo que estamos haciendo ahora", dice. "Cada uno de nosotros hará una cuarta parte del disco, intercambiaremos instrumentos. Haremos algo entre todos. Franz escribe muy buenas canciones, yo tocaré batería, Taylor el piano y Nate (Mendel) tocará el bajo. Me gusta lo que hacemos ahora, pero no quiero pensar en que siempre estaremos de gira".