El director de 'Interviú' declara que le pidieron 500 millones por la cinta

Agustín Valladolid, director de la revista Interviú, declaró ayer como testigo ante la juez Ana Revuelta que le pidieron 500 millones de pesetas por el vídeo sexual del director de El Mundo, Pedro J. Ramírez. Valladolid precisó que en todo momento actuó movido por interés periodístico, que al principio sólo se habló de material sensible y que no supo que se trataba de un vídeo en el que aparecía el director de El Mundo hasta la tercera entrevista.Valladolid dijo que después de los primeros contactos requirió la ayuda de Joaquín Martorell para dilucidar si se trataba de una estafa. Interviú pagó cinco millones para poder someter el vídeo a una prueba de autenticidad pero el técnico no llegó a conclusión alguna por falta de medios. La revista cortó la negociación a finales de julio.

El director de Interviú rechazó que hubiera escrito un guión que supuestamente habría copiado Exuperancia Rapú y que acompañaba a las copias del vídeo. Valladolid explicó que reclamó garantías a los negociadores y les indicó que, en caso de comprarlo, necesitaría la identidad de la mujer, su consentimiento en la grabación y difusión, extremos que uno de ellos apuntó en una libreta.

La impresión de Valladolid es que las dos personas que ofrecieron la grabación sólo tenían un móvil económico.

Joaquín Martorell, ex directivo del Grupo Zeta que también acudió como testigo, reconoció que tenía autonomía para negociar y que decidió no comprar el vídeo porque le pareció una éstafa.

Rafael Navas, ex director de la revista Dinero, que compareció voluntariamente, declaró que José María González Sánchez-Cantalejo, presunto filmador del vídeo, le ofreció la cinta y que él, después de verla, la rechazó y le advirtió que se trataba de un delito. Agregó que acto seguido avisó a Pedro J. Ramírez de su existencia.

Las declaraciones se realizaron debido a que la recusación presentada por el abogado e imputado José Emilio Rodríguez Menéndez no llegó al juzgado hasta mediodía de ayer. El caso ha pasado a la juez sustituta, Carmen Valcárcel, que deberá resolver la recusación.