"Pidieron testaferros alegando la amenaza de ETA"

Los patrimonios ofrecidos por las fundaciones de Liechtenstein como garantía para obtener créditos eran "importantes", según Paolo Gallone.

Pregunta. ¿Puede detallar de quién era y en qué consistía ese patrimonio importante?

Respuesta. Me refería al patrimonio detentado por la fundación Melvin, así como a las fundaciones Atom y Seasun, de Gómez de Liaño y Sitges, respectivamente. Estas fundaciones servían para garantizar créditos. Tenían sus cuentas en la Banque Cantonale Vaudoise. Los documentos de apertura de cuentas llevaban inicialmente un tipo de formulario, el llamado "B", a mi nombre. Cuando este formulario se suprimió y fue preciso identificar al beneficiario real, ante la demanda insistente y repetida de nuestros clientes, Gómez de Liaño, Sitges y Conde, en los llamados formularios "A", he interpuesto unos fiduciarios (...) de la sociedad fiduciaria Dreyfuss y Zurbuchen, de Lausana. Sin embargo, los beneficiarios reales eran conocidos por el banco, habiéndose ocupado siempre el señor Galletti de estas cuentas antes y después de haber abandonado la BCV [Renato Galletti era director adjunto del banco].

El señor Gómez de Liaño, Sitges y Conde han dicho y repetido constantemente (...) que eran objeto de amenazas de secuestro, como todos los españoles conocidos y con fortuna y que, en consecuencia, no podían aparece de nigún modo en cualquier clase de documentos. El señor Galletti y yo mismo les dijimos que nadie tendría acceso a esos documentos, pero no se lo creían. Para apoyar sus argumentos, nos enseñaron artículos de prensa en los que habían sido objeto de amenazas concretas en el caso de Conde por parte de ETA. Es por lo que tratamos de protegerles y asumimos, siendo sus identidades conocidas por el banco, no hacerles aparecer en los formularios "A"

P. ¿En qué entidad bancaria y financiera o de ahorro se ingresaban las cantidades que, en virtud de las distintas operaciones, se devengaron a favor de Asni Investments, Jamuna y Karieko Holding?

R. Los fondos estaban depositados en la Banque Cantonale Vaudoise.