El Gobierno vasco pide un examen respetuoso y serio de la propuesta de pacificación de Elkarri

La propuesta del movimiento social Elkarri para reinterpretar la Constitución en lo que se refiere a los derechos históricos de Euskadi y Navarra -con el fin de elevar el techo del autogobierno que concede el Estatuto y facilitar una salida negociada a la violencia ha sido bien recibida, aunque con cierta cautela, en todo el ámbito político vasco. El lehendakari, José Antonio Ardanza, describió la iniciativa como seria y bienintencionada y pidió que sea examinada con respeto y de forma "discreta y cuidadosa". Al igual que hizo Herri Batasuna, el sindicato abertzale LAB también ha calificado la iniciativa de "interesante", pero matizó que cualquier salida pasa por una negociación previa entre el Estado y ETA

Desde Buenos Aires, donde se encuentra en visita oficial, Ardanza dijo que pensaba que tras la propuesta de Elkarri hay "una voluntad clara" de buscar soluciones al conflicto. "Si sirve o no, no lo sé, aunque desearía que sirviera para avanzar en mayores consensos o en esa vía de la reconciliación", declaró el lehendakari.Ardanza valoró especialmente el, intento de "dar un paso adelante manteniendo el consenso entre los demócratas y viendo, por otra parte, si se puede avanzar en la reconciliación y la paz". Por ello, expresó su disconformidad con la divulgación prematura del borrador de la iniciativa. "El que lo haya filtrado sabrá con qué intención lo ha hecho. A mí me da la impresión de que lo hizo para torpedear", agregó.

Por su parte, el secretario general de LAB, Rafa Díez Usabiaga, calificó de "interesante" la iniciativa de Elkarri para ampliar el consenso político a partir de la Disposición Adicional Primera de la Constitución, que reconoce los derechos históricos de los territorios forales. Sin embargo, apostilló que la solución al conflicto entre ETA y el Gobierno tiene que ser en clave política.

Díez Usabiaga, que lidera la organización más estructurada de la llamada izquierda abertzale, con una implantación del 15% de los delegados sindicales en Euskadi y que mantiene un acuerdo de colaboración con ELA, el sindicato afín al PNV, coincidió también con HB en lamentar la inconcreción de la iniciativa elaborada por el grupo que lidera Jonan Fernández.

Pese a todo, el dirigente de LAB se congratuló de que grupos como Elkarri o personas como Miguel Herrero de Miñón, "que tienen relevancia en el ámbito jurídico y de cierto nivel en círculos del Estado", hagan reflexiones y se empiecen a abordar ciertas cuestiones constitucionales. A Diez Usabiaga no le parece mal que se intente hacer una operación de ingeniería política en torno a la Constitución, como paso previo a la solución política del conflicto vasco. Aunque añadió: "Lo que no se puede es mezclar el sustrato político de un acuerdo de fin de conflicto y su encaje jurídico". Sugería de este modo que sigue vigente el planteamiento histórico del entorno etarra de que cualquier salida pasa por la negociación previa entre ETA y el Estado.

En la misma línea de Ardanza, el vicelehendakari del Gobierno vasco, Juan José Ibarretxe , pidió a los grupos políticos y sociales vascos que mantengan una actitud de "respeto y humildad" a la hora de enjuiciar la propuesta. Ibarretxe advirtió que si la propuesta de Elkarri, "con mucho tiempo de trabajo detrás", no recibe una contestación serena, se haría un flaco favor a toda la sociedad vasca.

También el consejero de Interior, Juan María Atutxa, dijo que "todo aquello que profundice en el análisis de lo que nos posibilita la legislación vigente es plausible". "Es precisamente el camino que debemos seguir: no el de la imposición por la fuerza de cualquier pretensión, sino el de la lectura minuciosa y profunda de lo que la propia legislación nos proporciona", agregó.

Dudas del PP

Por su parte, el portavoz parlamentario del PP, Luis de Grandes, advirtió contra los juicios apresurados "radicalmente a favor y en contra", aunque cree"sospechoso" que la propuesta le haya parecido bien a Herri Batasuna. "Soy bastante escéptico sobre la viabilidad de una propuesta de este tipo, porque las bases que se invocan ya fueron en su momento rechazadas', , añadió.Desde el punto de vista académico, el catedrático de Derecho Constitucional de la Universidad Carlos III de Madrid, Luis Aguiar de Luque, dijo que la propuesta le parece "muy forzada y muy atrevida" y de "difícil encaje en la Constitución". Todo lo contrario que su colega de la Universidad de Deusto Santiago Larrazabal, quien dijo que "la Constitución y el Estatuto dan mucho juego todavía aunque dudó que ETA y HB acepten una solución por la vía de los derechos históricos.

El presidente de la Xunta de Galicia, Manuel Fraga, uno de los padres de la Carta Magna, indicó que "los derechos históricos no pueden servir de base para una operación constituyente", que es lo que a su juicio encierra la propuesta de Elkarri.