El Ateneo perdió 300 socios durante los meses de crisis

Las luchas intestinas en el Ateneo de Madrid se han cobrado su precio en socios. En mayo, antes de que estallara la tormenta, la entidad aseguraba contar con cerca de 4.300 integrantes. El 15 de octubre, fecha de las elecciones que culminaron con la designación de Carlos Paris como nuevo presidente, sólo estaban llamados a las urnas 4.030 ateneístas. Esos tres meses largos de convulsiones, en los que no han faltado encierros, asaltos al poder, asambleas tumultuosas, cierres de la sede y actuaciones judiciales cruzadas, se han saldado, por tanto,con 270 bajas: más del 6% de los integrantes de la institución.

Además de la inscripción, que asciende a 15.000 pesetas, los ateneístas satisfacen 4.800 pesetas al trimestre por su pertenencia al colectivo. En consecuencia, la caída en el número de socios se traduce en cinco millones de pesetas largos que se desvanecen de las cuentas de la entidad. Lejos quedan esos 5.500 ateneístas de los que se presumía en 1993.

Paris tiene claro qué ha sucedido en estos últimos años. "Aunque no está en mi ánimo criticar", apuntó, "los anteriores responsables no han sabido darle al Ateneo atractivo ni gracia. Ahora, habrá personas que se apunten". La lectura es muy distinta entre los miembros de la candidatura derrotada. "Sé de mucha gente que ha formalizado su renuncia con toda rapidez al comprobar el talante de los nuevos dirigentes", apuntó el ex secreta río general, Juan Iglesias.