La Guardia Civil detiene en Tarifa a dos ocupantes de la patera siniestrada

Efectivos de la Guardia Civil detuvieron en la zona de Tahivilla, en Tarifa (Cádiz), a dos personas de origen marroquí que dijeron ser ocupantes de la pequeña embarcación tipo patera que en la madrugada del pasado miércoles embarrancó en las costas de Punta Camarinal, en el mismo término municipal, provocando la muerte de al menos siete de sus 23 ocupantes, de los cuales seis sobrevivieron y otros 10 están desaparecidos. Los equipos de salvamento continuaron ayer rastreando la zona en su búsqueda. El ministro del Interior, Jaime Mayor Oreja, reaccionó a la tragedia afirmando que España debe impulsar la lucha para resolver este problema en el seno de la Unión Europea (UE).

Según informó ayer la Subdelegación del Gobierno en Cádiz, los, dos detenidos, que cuentan con 22 y 25 años de edad, explicaron que el siniestro se produjo después de que la patera, de unos siete metros de eslora, chocase contra las rocas a causa del temporal cuando ya se hallaban a poca distancia de la costa. Los detenidos confirmaron que fueron seis las personas que sobrevivieron a la tragedia de un total de 23 que viajaban en la embarcación.Durante todo el día de ayer, la patrullera de la Armada española Laya, con especialistas de buceo a bordo, participó en los trabajos de rastreo de los desaparecidos. Efectivos del Grupo Especial de Actividades Subacuáticas de la Guardia Civil también rastrearon desde el amanecer las aguas de la playa del Cañuelo, a unos 200 metros de Punta Camarinal, donde fuentes de Tarifa-Tráfico informaron que se habían descubierto huellas en la arena.

Ayer, el principal objetivo de los equipos de búsqueda fue intentar localizar los cuerpos de cinco norteafricanos que pudieron ser avistados por el helicóptero de la Sociedad Estatal de Salvamento, Helimer Andalucía, cuando se encontraban semihundidos, en una zona costera de difícil acceso debido al fuerte oleaje, y lo abrupto del lugar, cubierto de rocas y arrecifes. De los siete cadáveres localizados sólo dos han sido recuperados.

El Centro Zonal de Salvamento de Tarifa desplazó hasta el lugar del siniestro al remolcador Punta Mayor, que se unió a una patrullera del Servicio Marítimo de la Guardia Civil en la búsqueda de superficie para intentar localizar a los otros presuntos náufragos, de los que anoche seguía sin saberse nada.

A pesar de la nueva tragedia, el fenómeno de la inmigración ilegal continua. En la madrugada de ayer, el Servicio Marítimo de la Guardia Civil logró interceptar a otros tres inmigrantes ilegales de origen marroquí que viajaban indocumentados en una patera de siete metros de eslora por dos de manga, los cuales intentaron alcanzar la costa de Tarifa tras cruzar el Estrecho. Los detenidos fueron conducidos hasta la Comisaría de Policía de Algeciras (Cádiz), donde se iniciaron los trámites para su repatriación.

"Desigualdad del mundo"

En relación a la tragedia de Tarifa, Mayor Oreja señaló que la inmigración ilegal es un problema que "tiene, su origen en la desigualdad del mundo y que afecta a la UE", y añadió que "España no debe permanecer impasible ante estas tragedias, sino que debe impulsar ' en el seno de la UE la cooperación internacional para que en esos países no existan las desigualdades de hoy". El ministro apuntó que esta "lucha debe estar en la UE, porque muchos de estos inmigrantes no se quedan en España; el nuestro es el país por el que acceden a Europa".Por su parte, el subdelegado del Gobierno en Cádiz, Miguel Osuna, aseguró que ni las autoridades de Marruecos ni los ciudadanos marroquíes dan la importancia que tiene al permanente naufragio de pateras en el Estrecho y a las numerosas víctimas que sé registran, entre inmigrantes indocumentados. Osuna añadió que mantiene contactos con representantes gubernamentales de Marruecos en el Rif, en el norte del país, para "transmitirles la inquietud que aquí tenemos" con el problema de las pateras. Según el subdelegado, la causa del naufragio de las pateras suele ser el cambio repentino de las corrientes en el Estrecho de Gibraltar, lo que sorprende a las pequeñas embarcaciones que salen de Marruecos con buen tiempo.