Explicación nuclear

EL CASO de sabotaje contra la central nuclear de Cofrentes en Valencia descubierto en junio no ha sido aclarado suficientemente. El Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) y la Empresa Nacional del Uranio (ENUSA) han asegurado que "la seguridad y protección radiológicas" no se han visto afectadas por las anomalías detectadas en varias varillas de combustible nuclear, procedentes de la fábrica de Juzbado, que iban a ser introducidas en el reactor nuclear de la central. Incluso aceptando que esas anomalías -caso de no haber sido detectadas a tiempo- no hubieran tenido consecuencias dañinas para la salud o el medio ambiente, resulta dificil entender la oscuridad en que el incidente se ha mantenido hasta ahora.Los desperfectos en las vainas que contienen el combustible nuclear fueron descubiertos hace cuatro meses, a la llegada de las varillas a Cofrentes. Suponemos que se abrió la oportuna investigación que dio como resultado que se despidiera a un trabajador, precisamente del departamento de control de calidad de Juzbado, el pasado 16 de septiembre; y suponemos también que se imputó la responsabilidad del suceso a dicho trabajador. De estos hechos, de indudable gravedad, la opinión pública ha tenido noticia a mediados de octubre. El CSN ha calificado el incidente nada menos que como intento de sabotaje, pero se ignora absolutamente todo de las causas y circunstancias del mismo, sobre las que -hay que suponer de nuevo- algo ha debido concluir la investigación abierta en junio Para determinar las causas del incidente y las motivaciones del saboteador.

Demasiadas suposiciones. Pero ni siquiera eso tenemos en lo que respecta a otras cuestiones. ¿Cuáles han sido los motivos de un tal sabotaje? ¿Es un hecho aislado, fruto de una circunstancia excepcional? ¿El trabajador despedido ha sido el único partícipe o han podido estar involucradas más personas? ¿Existe alguna relación entre este hecho y el error en el envío de contenedores a EE UU hace unos meses, tenido entonces por una simple negligencia? Éstas son algunas, aunque no las únicas, preguntas que cabría hacer y que contribuirían a aclarar un incidente que quizá carece de importancia, pero que suscita inquietud entre los ciudadanos precisamente por la opacidad en que se siguen manteniendo las circunstancias del mismo. Todo lo que rodea a la industria nuclear tiene un impacto sobre la opinión pública mucho, mayor que cualquier otra actividad industrial. Los responsables del sector deberían saberlo.