Matutes dice que las escuchas de Telefónica en Perú son un asunto interno

El PSOE pidió ayer al Gobierno que utilice sus privilegiadas relaciones con la compañía Telefónica para disipar cualquier duda sobre las implicaciones que una filial de esa empresa tiene en las escuchas telefónicas ilegales a miembros de la oposición democrática en Perú. Matutes respondió que el tema era un asunto interno peruano.Jesús Caldera, secretario general del Grupo Parlamentario Socialista, preguntó ayer al ministro de Asuntos Exteriores, Abel Matutes, sobre las denuncias formuladas por la oposición democrática peruana que afectan, en su opinión, a la imagen de las empresas españolas en el extranjero y concretamente en Latinoamérica. Y recordó las graves amenazas recibidas por el diputado socialista Luis Yáñez por denunciar en España esas acusaciones.

Abel Matutes respondió que el Gobierno conocía desde el pasado julio, a través de la embajada en Lima, las acusaciones de los medios de comunicación peruanos y la existencia de la comisión de investigación que el Congreso peruano ha creado para investigar el caso. Matutes subrayó que la filial de Telefónica en Perú es una empresa peruana sometida a todos los efectos a la legislación de ese país y que el Gobierno español no puede inmiscuirse en los asuntos internos de la vida política de otro país. "Este es un asunto peruano que deben resolver las autoridades peruanas", señaló el ministro, que recalcó que no se debe prejuzgar cuál será la conclusión final de la comisión investigadora del Congreso peruano.