A su cauce
La precaria situación del mercado de valores español no pudo soportar las contundentes declaraciones del presidente de la Reserva Federal y la posterior reacción de Wall Street. El resultado ha sido un recorte del 1,62% que cuestiona los esfuerzos de algunos valores por ponerle buena: cara al mal tiempo. La contratación marcó un ritmo vertiginoso cuando los inversores comenzaron a sacar papel al mercado ante la caída dé Wall Street y terminó la jornada con un total de 108.677 millones de pesetas, una cifra que muestra el esfuerzo de absorción de papel.El mercado de deuda también sufrió las consecuencias de la presión vendedora de activos españoles y la rentabilidad de la emisión a 10 años terminaba con una subida de siete centésimas, en el 5,89%, a pesar de que el Tesoro había confirmado la tendencia oficial con un descenso en las subastas celebradas esa misma mañana. El diferencial con la deuda alemana se situó en 0,42 puntos, acumulando así una subida de siete centésima en los últimos cinco días.
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