El PP rompe el fuego, atacando a Caballero en su pueblo natal
Manuel Fraga, cabeza de cartel del PP y presidente de la Xunta de Galicia, inauguró su campaña en Ponteareas (18.000 habitantes), ante un auditorio entregado de casi un millar de personas. Fue recibido en el Ayuntamiento, visitó el club de ancianos, estrechó manos y pidió votos para asegurar lo que vaticinan las encuestas: que renovará la mayoría absoluta.En esta localidad gobierna desde 1968 un polémico alcalde de origen falangista, José Castro, que, sobre todo, como Fraga dijo, es "un amigo". Castro mandó bachear el mismo viernes el tramo de carretera que lleva al polideportivo, y abrió el mitin planteando: uno, la providencial personalidad política de Fraga; dos, la traición a Ponteareas de su paisano Abel Caballero; y tres, que la Xunta construya ya el enlace del Cofurco con la autovía Rías Baixas, que pasa a dos kilómetros del pueblo.
La traición de Caballero se evidencia, según Castro, en que hace unos días declaró que quería ser "el primer presidente de la Xunta de Vigo". No vale que el candidato socialista lo aplicara en un sentido amplio, porque Ponteareas pertenece al área de influencia de Vigo. "Puenteareas [así denomina Castro a la villa] no puede votarle jamás porque ha renegado de su pueblo, ahora dice que es vigués", acusó el alcalde popular. "Es de malnacidos olvidarse del pueblo de uno", abundó luego Xosé Cuiña, secretario general del PP gallego y número uno por Pontevedra.
Fraga insistió en la misma censura y pasó a las promesas. Las autovías, dijo, "significan cambiar por cientos de miles de millones el valor de las tierra?. De ahí que respondiera al alcalde: "Pepe, estamos en situación de comprometer el enlace del Cofurco"
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