La Generalitat valenciana aprueba ayudas para paliar los daños de la gota fría

El pleno del Gobierno valenciano, en una reunión extraordinaria celebrada ayer en Alicante, aprobó un decreto de medidas urgentes para reparar los daños causados por la últimas inundaciones en las provincias de Alicante y Valencia, todavía oficialmente no evaluados. Las iniciativas incluyen la, reparación de las infraestructuras que son competencia de, la Generalitat, indemnizaciones a los familiares de las víctimas y ayudas a los particulares, a través de la cofinanciación de préstamos a bajo interés. En principio, el Consell ha excluido de este decreto a los ayuntamientos. Las corporaciones locales tendrán que hacer frente por sí mismas a. los gastos para reparar sus infraestructuras y servicios.El prinicipal perjudicado por esta decisión será precisamente el Ayuntamiento de Alicante ya que, según una primera estimación del alcalde, Luis Díaz Alperi, del PP, los daños oscilarán entre los 1.500 y 2.000 millones de pesetas.

Mientras, ayer fue localizado el cadáver del ciudadano británico Richard Allan Mould, de 53 años, desaparecido el martes en Pego (Alicante). Se trata de la quinta víctima mortal producida por la tromba de agua que cayó en Alicante el pasado martes.

Las consecuencias del temporal aún permanecían ayer en la zona de San Juan, que continuaba anegada y donde decenas de vecinos permanecían aún aislados. Parte del agua que cayó el martes por la mañana sobre la ciudad de Alicante encontró su acomodo en el lago que esporádicamente se instala este barrio turístico. Según los expertos, la falta de planificación a la hora de urbanizar la zona provoca este tipo de inundaciones. Desde primera hora de la mañana las brigadas de obras trabajaron en la apertura de zanjas y acequias para que el agua desemboque en el mar. Esta operación se efectuó en las urbanizaciones Tritón y las Sirenas, que se encontraban anegadas y en las que estaban atrapados unos 150 vecinos.