La Rey Juan Carlos, en un colegio y un centro de FP

La Rey Juan Carlos, sexta universidad pública del distrito único madrileño, empieza su trayectoria de prestado. En el campus aún no se ha colocado un solo ladrillo, así que las cuatro primeras carreras (Informática de Gestión, Informática de Sistemas, Fisioterapia y Terapia Ocupacional) habrán de impartirse en escenarios más bien poco ortodoxos para la enseñanza superior: las dos primeras, en el antiguo colegio público Juan Gris de Móstoles; las otras dos, en un centro de Formación Profesional de Alcorcón.Con todo, los responsables de la nueva universidad madrileña insisten en que la provisional ubicación de las clases no es sinónimo de precariedad. Se han hecho obras en las aulas, en los despachos de los profesores y en las bibliotecas. Resulta evidente que esto no es un campus, pero cumple con todos los requisitos, subrayó un portavoz. Las 300 plazas, 75 por titulación, se cubrieron en la convocatoria de selectividad de junio con notas de corte que iban del 6,06 de la Informática de Gestión al 7,49 de Fisioterapia.

Tercer campus

Las obras en el campus de Móstoles, sede del rectorado y lugar en el que el propio don Juan Carlos colocó la simbólica primera piedra el pasado mes de febrero, no arrancarán al menos hasta noviembre. Ni siquiera las torretas eléctricas de alta tensión que lo cruzan han sido desviadas por el momento. En lo relativo al tercer campus, el situado en la localidad de Fuenlabrada, el futuro aún se presenta más indefinido: hay parcelas que todavía se encuentran pendientes de los trámites de expropiación.

Para el próximo curso, la oferta de la Universidad Rey Juan Carlos se ampliará con Ingeniería Industrial y Químicas (Móstoles); Enfermería y, tal vez, Medicina (Alcorcón), y Publicidad y Comunicaciones Audiovisuales, en el caso de Fuenlabrada.

Nadie asegura que, para entonces, la universidad disponga de algún edificio propio. Además, tendrá que asumirlos primeros cursos del Ramón Carande, un centro universitario hasta ahora adscrito a la Universidad Complutense de Madrid.

Por lo pronto, el próximo 8 de octubre comienzan las clases con un profesorado integrado por 23 profesionales. Los estudiantes de las carreras técnicas tendrán a su disposición 40 ordenadores, lo que permitirá que, cada alumno disponga de su propia unidad para las sesiones prácticas.