El Gobierno del PP reorganiza la oficina regional abierta en Bruselas

El Gobierno de Alberto Ruiz-Gallardón (PP) va a hacer una revolución en su casa de Bruselas. La oficina que tiene allí la Comunidad de Madrid desde hace tres años, cuando fue inaugurada por el anterior Ejecutivo del socialista Joaquín Leguina, va a sufrir profundos cambios, según ha explicado el consejero de Presidencia, Jesús Pedroche.El Partido Popular pretende ampliar la plantilla de funcionarios madrileños en Bruselas y desarrollar iniciativas para "prestigiar más" esta oficina. "En la actualidad", explica Pedroche, "se está acometiendo un importante proceso de reorganización de la oficina que persigue la mayor especialización del personal técnico que allí trabaja y la aplicación de nuevos criterios en cuanto a la distribución de los diversos asuntos que trata". La Oficina de Bruselas va a ser reestructurada en varias secciones que estarán dirigidas por un técnico especializado cuyo trabajo será supervisado por el director de la oficina.

Los técnicos van a contar con la ayuda de universitarios que recibirán becas para trabajar en Bruselas. "Esta misma semana firmaré un convenio con la Universidad Pontificia para que dos de sus alumnos se trasladen a Bruselas", explica Pedroche.

La oficina se abrió para captar inversiones extranjeras, asesorar a los empresarios madrileños en sus gestiones ante la Unión Europea y promocionar la Comunidad. Durante los años de gestión socialista, el PP denunció la ineficacia de dicha oficina y su falta de medios.

Con el PP en el Gobierno, la oficina ha mantenido un funcionamiento similar y aunque pasó a depender de la Consejería de Presidencia -con los socialistas, la financiación de la Oficina dependía de Economía- los cambios no se han notado. Este mismo año, Presidencia ha reconocido que carecía de presupuesto para financiar la oficina y ha tenido que ser el Instituto Madrileño de Desarrollo (IMADE) quien se haga cargo de los costes. "Pretendemos crear un consorcio con la patronal, la Cámara de Comercio y las universidades para financiar conjuntamente los gastos de esta oficina", explica Pedroche.

"Hasta el moño"

Las penurias económicas de la oficina fueron aprovechadas por el diputado socialista Javier Ledesma. El 19 de junio de 1996 espetó al consejero de Presidencia: "La Oficina de Bruselas es un desastre. Ustedes han aburrido a la Persona que estaba dirigiéndola, Carmen Burriel, que se ha venido harta. Las tres secretarias llevan cinco meses sin cobrar. Aquello es un cementerio. Si quieren cerrar la oficina, díganlo, porque esa oficina está muerta y su directora, hasta el moño". Pedroche le replicó: "Sus alusiones son mezquinas hacia unos trabajadores cuya profesionalidad no voy a permitir que se ponga en duda. Nadie lleva cinco meses sin cobrar y la directora se ha venido porque a su marido le han nombrado jefe de protocolo de la Casa Real",