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Reportaje:

Donde nacen las canciones

Pedro Guerra recorre los lugares de la capital donde se inspiró para componer sus temas

Aunque nació en Canarias y nunca renunciará a ello, el cantautor Pedro Guerra se siente madrileño por los cuatro costados desde que en 1994 decidió quedarse a vivir en la ciudad. Conoce como nadie los garitos donde en estos últimos años se han refugiado los artistas que cantan en voz baja, sin alardear de nada y con la única intención de invitar a pensar cuando se les escucha. Pero hoy Pedro Guerra canta en un lugar más popular, el auditorio del Parque de Atracciones, por donde estas últimas semanas ha pasado una avalancha de cantautores, tanto veteranos como los de su misma generación.Muchos son los rincones concretos de la capital que han inspirado a este artista ultramarino. Ayer, en compañía de este periódico, recorrió algunos de ellos en un fugaz descanso de los ensayos del recital. Su segundo disco, Tan cerca de mí, afirma haberlo pensado y escrito íntegramente en Madrid, aunque Siete puertas es una alusión a su Tenerife natal. "Es un disco melancólico", confiesa, "muy madrileño, pero muy nostálgico. Más pesimista que Golosinas. Una ciudad grande te genera más pesimismo. Pero me encanta vivir aquí, aunque voy a menudo a Canarias".

'Moreno'

"... Hey, hey moreno, / hey moreno, sé bueno, / y por cinco duritos / te doy un poema / con un dibujito; / ayúdame,moreno... ".

En Madrid encuentra personajes con más facilidad que en otros lugares; ahí está Nieves, la mujer que vende poemas entre Preciados, Callao y Gran Vía, y que le ha inspirado Moreno: "Es una forma de mendicidad con una lectura poética y origial. Su manera de pedir se aleja del crudo cartel de 'tengo hambre, denme algo'. Ella escribe canciones que vende; así no considera que está pidiendo dinero". Pedro pierde la mirada por la Gran Vía como si buscara a Nieves, protagonista de su canción: "Llegué a hablar después varias veces con ella y supo que le hice la canción. Hace mucho que no sé de ella, incluso la buscamos para grabar el vídeo, pero tuvimos que recurrir a una actriz". Y reflexiona: "En Madrid la marginalidad está más presente. Los personajes son iguales en todos los lugares, pero se ven más en ciudades como ésta. Antes vivía en la plaza del Conde de Barajas y la mendicidad procedía del Este, eran rusos y polacos quienes dormían en los bancos". Ahora vive en la plaza de la Paja: "Creo que es mi lugar definitivo, se hace vida tranquila y de barrio. Le haría una canción, pero el nombre puede confundir".

'La chica que baila'

" ... La chica que baila / te invita a soñar, / y bailan tus sueños detrás del cristal..."

Guerra se refiere al sexo en dos canciones: Sexo y La chica que baila, dedicada a una chica del peep show de Atocha. "Fui un par de veces, pero no he vuelto. La canción me salió cuando estaba trabajando en otra. No sé si Brandy, como decía llamarse la chica que vi tras el cristal, conoce esta canción, me da corte volver para enseñársela". El ambiente de un lugar donde los hombres pagan para ver desnudarse a una mujer tras un cristal, sin poderla tocar, llama su atención: "Este mundo no es tan marginal como parece. Van miles de personas, pero no lo dicen. Es un rollo masculino, las chicas sólo van a trabajar, no es tan desagradable para ellas como la prostitución. Es la prueba de que el sexo es aún tabú absoluto. Hay un morbo que no lo encuentran con sus parejas".

'Pasa'

"... Aquí hay una canción / que nos descansa, / un hueco para el alma, / sentirse como en casa, un alto en el camino, / nada más... ".

Sin entrar en las discusiones y en los matices surgidos a raíz de la eclosión de los nuevos cantautores, es inevitable referirse al asunto poniendo a Pedro Guerra a la cabeza de ese supuesto movimiento: "El comienzo fue una mera coincidencia. Nunca ha existido un movimiento organizado de nuevos cantautores. Siempre he dicho que sí soy un cantautor, pero con el tiempo el término empieza a aburrirme, es un lastre". Un bareto de Madrid, por encima de todos,tiene buena culpa de ese resurgir cantautoril: Libertad 8. En Pasa, tema que abre el disco, Pedro le rinde su homenaje: "Es el sitio donde yo empecé y donde empezamos todos. En el 93 venía de Canarias y tocaba aquí, en el café del María Guerrero y en El Sur, en Vallecas. Con estos bolos me pagaba el billete de vuelta. En el 94 empecé a ir a Libertad 8 cada martes. Por aquí han pasado, además de veteranos como Luis Pastor, todos los nuevos que después han sacado disco: Rosana, Ismael Serrano, Tontxu, Javier Álvarez, Jorge Drexler, Paco Bello ..."

'Debajo del puente'

"... Debajo del puente, en el río, / hay un mundo de gente, abajo, en el río, en el puente /y arriba del puente, / las cosas pendientes... ".

"Cuando viví en la Colonia del Manzanares, pasaba mucho por los puentes del Manzanares. Sin querer, me sugirieron la canción Debajo del puente. Pasa el río, pero también son sitios oscuros con botes de basura, mendigos y tal ..."

El cantante canario podrá expresar con sus propias palabras el cariño que le ha tomado a esta ciudad en su recital de hoy en el parque, donde hará un repaso de sus dos discos. Una ciudad que le ha acogido y donde vive tranquilo: "No me molesta el acoso de la fama y no me siento perseguido. Todo el mundo se acerca muy respetuoso cuando me saludan al reconocerme". Pedro Guerra se guarda para el final un deseo íntimo: "Me gustaría poder volver a cantar en sitios pequeños como Libertad 8, pero tendría que ser sin anunciarlo"

Pedro Guerra actúa hoy en el Parque de Atracciones (Casa de Campo, metro Batán). 20.30 horas. 475 pesetas.

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