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La Ertzaintza detiene al supuesto cabecilla del grupo que provocó los incidentes de Ibarra

Dos jóvenes de Tolosa, lker Bear, de 21 años de edad, y Alex E. J., de 19, fueron detenidos ayer por la Ertzaintza bajo la acusación de haber participado en los incidentes del pasado domingo en Ibarra, en los que un agente hirió de un disparo a un alborotador que, presuntamente, intentaba lanzarle un cóctel mólotov. La policía vasca incluso considera que uno de los dos es el cabecilla de los grupos que protagonizaron los disturbios y que, según testigos presenciales, se comportaron de una forma perfectamente organizada. Hasta el momento, son cuatro las personas arrestadas por los violentos altercados que interrumpieron en el día de san Bartolomé las tradicionales fiestas de esa localidad guipuzcoana.

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Los dos últimos detenidos están acusados de los delitos de desórdenes públicos y estragos. La Ertzaintza, que investiga los hechos en los que resultó agredido uno de sus agentes, sostiene que ambos participaron activamente en los incidentes iniciados a las dos de la madrugada en Ibarra, en plenas fiestas patronales, cuando una veintena de encapuchados asaltó una sucursal de la Caja Laboral Popular, que resultó quemada, y cruzó coches en la calzada, rompió cristales y destrozó fachadas de la calle principal, que sirve de acceso a la localidad.El arresto de Alex E. J. se efectuó en la madrugada de ayer, en su residencia de Tolosa, mientras que lker Bear fue detenido en su lugar de trabajo, en la sede de una empresa de la vecina ciudad de Legorreta. Ninguno de los dos lo había sido anteriormente, aunque sí figuraban en los archivos de la policía vasca, que los tenía identificados como participantes en otros incidentes callejeros. En los registros domiciliarios que efectuaron por orden judicial, los ertzainas se incautaron de capuchas, manuales de guerrilla urbana, rodamientos y un petardo, objetos habituales de los grupos radicales dedicados a la violencia callejera.

Rechazada una moción de HB

Por, otra parte, la corporación municipal de Villabona, la población de la que es natural Íñigo Guridi, el herido en una pierna por el disparo de un ertzaina durante los incidentes de Ibarra, rechazó ayer en un pleno extraordinario una moción, presentada por las Gestoras pro Amnistía y apoyada por Herri Batasuna (HB), en la que se afirma que es víctima de un "montaje mediático-policial".

A la sesión asistieron únicamente siete de los trece ediles y en ella se impusieron los cuatro votos de la coalición independiente Bidean, a la que pertenece el alcalde, Joxe Mujica, sobre los tres de HB.

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Las Gestoras pedían que el Ayuntamiento prestara la ayuda necesaria a Guridi y a su familia y exigía que la Ertzaintza "guarde sus pistolas" y esclarezca los hechos.

Precisamente, varios desconocidos incendiaron en la pasada madrugada una estancia del Juzgado de Paz de Villabona. El suceso se produjo a la una y media de la madrugada en una sala que comparten el Juzgado y la Asociación de Alcohólicos Anónimos del municipio.

La Policía municipal avisó a la Ertzaintza y a los bomberos de Tolosa, que extinguieron el fuego antes de que alcanzara grandes proporciones. Los agentes localizaron en la habitación quemada dos garrafas de gasolina semillenas y una botella de cerveza vacía.

Estíbaliz Amenabarro, dirigente de las Gestoras, declaró ayer, en una rueda de prensa en Ibarra, que la versión que se ha dado de los altercados ocurridos en la localidad es "una mentira". Según la portavoz radical, Guridi, para el que el juez, que le imputa un asesinato frustrado, decretó ayer la prisión preventiva cuando sea dado de alta, fue detenido en el hospital cuando la Ertzaintza supo que había un herido de bala porque "tenía que justificar los disparos". Amenabarro destacó que este "montaje" llevará al joven a la cárcel sin culpa alguna".

Mientras tanto, los atentados de los grupos Y de apoyo a ETA, siguen produciéndose casi a diario en numerosos pueblos vascos. El pasado domingo, el concesionario de Renault de Zarautz sufrió de madrugada un ataque con un objeto incendiario que destrozó un vehículo de la exposición. Es la séptima vez que este establecimiento ha sido atacado por desconocidos.

Su propietario aseguró ayer que este atentado ha resultado el menos grave. Luego, tras reconocer que está harto de los violentos, dijo: "Al final, van a conseguir que nos vayamos y dejemos sin trabajo a las siete personas que están aquí".

La acción fue reivindicada a través de una llamada anónima al diario Egin para criticar el colaboracionismo" del Gobierno francés.

Otro ataque, protagonizado por cuatro encapuchados, destrozó en la noche del lunes una oficina del Banco Central-Hispano en Leioa (Vizcaya), si bien los daños materiales fueron escasos. Los violentos lanzaron un artefacto incendiario contra las lunas y, aunque no explotó, las rompió. En esta ocasión, la reivindicación, también anónima y a través de Egin, fue para protestar por la extradición del dirigente etarra Juan Vicente Jauregizuria, vecino de la localidad.

Finalmente, agentes de la Policía Nacional detuvieron el pasado martes a dos hombres como presuntos autores de un delito de atentado contra la autoridad y desórdenes públicos durante las Fiestas de Burlada (Navarra) el pasado día 14, según informó ayer la agencia Vasco Press citando fuentes de la Delegación del Gobierno en Navarra.

Los detenidos han sido identificados como E. G. B. e I. S. I. Este último llevaba al ser arrestado un panfleto, titulado Adelante con el sabotaje, con instrucciones y consejos para realizar actos violentos.

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