Un pescador muere fulminado por un rayo en el embalse de Santillana

Un pescador falleció a las ocho de la tarde de ayer, fulminado por un rayo, a orillas del embalse de Santillana, en el término de Soto del Real. El accidente sobrevino cuando, tras desatarse una fuerte tormenta, el pescador abrió un paraguas para protegerse de la lluvia. En ese momento, según los testigos, el rayo le alcanzó en el hombro izquierdo. El hombre, G. I., jubilado, de 65 años, falleció en el acto.

La víctima, fulminado por el rayo, cayó sobre otro pescador, compañero suyo. Este, a quien alcanzó parte de la descarga, perdió la consciencia. Al recuperarla, siempre según las primeras versiones, pidió auxilio. En el embalse se encontraban pescando otras cinco personas, quienes, al oír los gritos de socorro, acudieron al lugar de los hechos: una roca de unos tres metros cuadrados de superficie, rodeada de barrizal. Cogieron al fallecido, que había quedado con el cuerpo medio hundido en el Agua, y lo izaron hasta tierra firme.Uno de estos pescadores avisó a la Guardia Civil y a los servicios de ambulancias. La primera dotación en llegar fue la de la Cruz Roja. de Colmenar Viejo. Eran dos socorristas y un conductor, todos voluntarios. Lo primero que vieron fue al herido, C. C. G., de 52 años. El hombre estaba tendido en el suelo, cubierto de mantas. Aún conmocionado por la descarga, se quejaba de un fuerte dolor en el brazo derecho. En su relato, confuso, recordó que al desatarse la tormenta su compañero había abierto un paraguas; luego sobrevino una fuerte descarga y perdió la consciencia.

Unos metros más adelante, los sanitarios de la Cruz Roja hallaron el cuerpo sin vida del otro pescador. El rayo le había alcanzado entre el cuello y el hombro izquierdo.

Posteriormente, llegó al lugar de los hechos la ambulancia del Insalud. Este servicio 'trasladó al herido al hospital de La Paz. El primer parte médico establece que sufre lesiones por fulguración en el brazo y el costado derecho, así como quemaduras en el muslo izquierdo. Su vida, según los médicos, no corre peligro.

El embalse de Santillana es muy concurrido por los pescadores de la región, informa Vicente G. Olaya. Entre sus aguas viven grandes carpas y lucios, una especie introducida en España hace unas décadas y que es muy apreciada por los pescadores dado su gran tamaño. Un ejemplar de lucio puede llegar a medir más de un metro.

El último accidente mortal en el que un hombre falleció en Madrid como consecuencia de un rayo ocurrió en junio de 1995, cuando un ciclista que se había refugiado en una cueva de Abantos fue alcanzado por una descarga eléctrica. Anteriormente, en octubre de 1994, un rayo fulminó a un visitante del zoo de Madrid.