96 futbolistas suramericanos tendrán derecho a ser españoles dentro de un año, según la AFE
La Liga Profesional y el sindicato de jugadores (AFE) se reunirán hoy con la Federación Española de Fútbol para hablar de la posible reducción del número de extranjeros. La Liga defiende que existe un convenio en vigor hasta el año 2000, pero hará una oferta: reducción del número de extranjeros sólo en la Segunda División. La AFE demanda una reducción inmediata. La AFE va con datos en la mano: 96 jugadores suramericanos tendrán derecho a ser españoles dentro de un año. "Eso quiere decir, que podrán ficharse otros 96 más", añadió un portavoz.
Las posiciones parecen muy distanciadas. La Liga quiere negociar, pero no parece dispuesta a tocar la situación en Primera División. La AFE demanda resultados inmediatos porque considera que el aluvión de extranjeros es una seria amenaza al fútbol autóctono. Y la AFE pone un ejemplo concluyente: la situación de los jugadores suramericanos, que ocupan plaza de extranjero pero pueden nacionalizarse españoles a los dos años. Sucedió ya la temporada pasada con los casos de Simeone, Esnáider, Redondo, Zalazar y Mauro Silva, entre otros, pero el aluvión que se aproxima es impresionante: 96 futbolistas suramericanos podrán acogerse a la nacionalidad española dentro de un año. La lista elaborada por la AFE suma a 34 argentinos, 1 boliviano, 1 colombiano, 1 chileno, 1 costarricense, 9 paraguayos, 3 peruanos, 13 uruguayos y 33 brasileños. Todos ellos son jugadores con contrato en vigor y más de un año de residencia y juegan en equipos de Primera y Segunda División. "Ahora ocupan plaza de extranjero, pero dentro de un año serán españoles y podrán ser sustituidos por otros 96 suramericanos". Algunos de estos jugadores tienen en España una plataforma ideal para acceder al mercado europeo. Simeone, por ejemplo, juega en el Inter sin ocupar plaza de extranjero, ya que es español y, por tanto, comunitario.
Reducción en Segunda
La Liga no quiere abrir un frente con el sindicato, pero no está dispuesta a una reducción de extranjeros (la situación actual es 6 extranjeros en plantilla y sólo 4 en el terreno de juego) en la Primera División. La propuesta de la Liga tiene el siguiente argumento: no es posible reducir el número de extranjeros en la Primera División porque eso mermaría a los clubes españoles a la ora de competir en los torneos europeos, pero sí podría hacerse la Segunda División. Es más, según datos de la propia Liga, el 45% de los extranjeros en clubes de Segunda disputaron menos del 20% de los partidos. Aquí sí que podemos concluir que se ha fichado por fichar, que no ha sido muy útil", concluyó un portavoz. Ese porcentaje es equivalente para el 33% de los jugadores comunitarios.Pero otra cuestión es en lo que afecta a la Primera División. La Liga española contó con 189 jugadores extranjeros y 69 comunitarios, cifra superior a la de otros países europeos (Alemania tuvo a 161 europeos y 33 no comunitarios, Italia a 9 comunitarios y 50 extranjeros e Inglaterra a 112 comunitarios y 66 extranjeros), pero fue el país que obtuvo mejor coeficiente en las competiciones continentales. "Si queremos mantener esa posición, debemos seguir como estamos, entre otras cosas porque países como Italia van a ir a la libertad total".
Los argumentos de la Liga chocan frontalmente con los del sindicato. Para la AFE, la situación ya es suficientemente concluyente: "Estamos demostrando que este sistema va a la quiebra y nadie quiere atender as peticiones de los futbolisas", dice su secretario general, Gerardo Movilla. Para la AFE si no existe una propuesta aceptable hoy mismo, no habrá otra salida que ir a la convocatoria de una asamblea extraordinaria. En esa asamblea, de fecha todavía por decidir, puede plantearse la palabra huelga. "Tenemos un mandato de los futbolistas, pero si se agotan las vías de diálogo tienen que ser ellos quienes se impliquen".
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