El anuncio de lluvias complica la situación del río Oder en Alemania
La situación en las regiones inundadas por la crecida del río Oder, en el este de Alemania, se mantiene estable "pero en un nivel crítico", manifestaron ayer fuentes del Ministerio del Interior. En Francfort del Oder, el trazado de las calles se ha desvanecido y la gente recorre la ciudad en canoas como si se tratara de una Venecia del Este. Al sur, en el pueblo de Aurith, cuyos habitantes fueron evacuados, las casas han desaparecido bajo la inundación. El fin de la emergencia todavía no se divisa. Miles de soldados se esfuerzan para contener una de las peores inundaciones en la historia del país.Según los expertos, aunque dejara dé llover y las aguas no siguieran subiendo, las zonas afectadas permanecerían inundadas durante los próximos 15 días. Pero la situación se puede complicar en las próximas horas. El nivel de las aguas en Francfort aumenta a una velocidad de un centímetro cúbico por hora y los informes del tiempo son pesimistas: anuncian nuevas lluvias y tormentas en la región.
Los equipos de socorro trabajan día y noche en el reforzamiento de los diques. En el llano del Oder, al norte de Francfort, se utilizaron durante la noche del viernes cerca de 200.000 sacos terreros con los que se logró parar el embate de las aguas. Una rotura de los diques en el llano del Oder podría llevar en pocas horas a la inundación de una zona de 640 kilómetros cuadrados donde viven 20.000 personas.
Las evacuaciones no fueron fáciles en un primer momento. La población, que vive hace tiempo al lado del río y está acostumbrada a luchar contra él, no quería entender que las dimensiones de la catástrofe eran algo que no podía compararse con otras crecidas.
Ni siquiera las trágicas noticias de Polonia, donde han muerto varias decenas de personas y hasta un hipopótamo perdió la vida al inundarse el zoológico de Oppeln, podían convencer a la gente de que había que temer más a las aguas que a los saqueos. Sólo un llamamiento de las autoridades del Estado de Brandeburgo a través de las emisoras de radio logró persuadirles de que sus vidas podían correr peligro y así los logró sacar de sus casas.
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