Intransigencia justificada

Estoy persuadido que el programa económico de IU afronta y enfrenta de manera clara y explícita el dogmatismo ultraliberal que amenaza con retrotraer a la civilización europea a los tiempos de Charles Dickens. La permanente invocación de Julio Anguita a la preeminencia de los contenidos programáticos de un hipotético y deseable acuerdo electoral con el PSOE y otras organizaciones de izquierdas por encima de cualquier otro tipo de consideraciones aparece cada día con más nitidez, a la luz de la victoria electoral de Jospin, como garantía de que no se va a traicionar a un electorado cada día más sensible a la amenaza del "globalitarismo".A mi juicio, la intransigencia de Anguita, en relación al tipo de acuerdo a que ha llegado la coalición con los socialistas en Galicia, está plenamente justificada: a estas alturas, no es un secreto para nadie que una fracción de la socialdemocracia europea, encabezada por Delors y González, se ha comportado políticamente como auténtico caballo de Troya del pensamiento único. Si la renuncia de González y el nuevo talante de Almunia significa el abandono del PSOE de las servidumbres hacia el ultraliberalismo y no una maniobra electoralista, los próximos meses lo dirán. En este sentido, todo el mundo debería hablar con todo el mundo, y sería muy de lamentar que el resentimiento impidiera a Nueva Izquierda jugar un auténtico papel mediador, tanto como ignorar por parte de IU la capacidad de interlocución que pueda conservar Alfonso Guerra. .