_
_
_
_

Pablo Carbonell hace la competencia a Wyoming.

Sin más ayuda que su guitarra eléctrica y su guasa, Pablo Carbonell se recluye tres días en la sala Clamores (Alburquerque, 14; metro Bilbao; 23.00; 800 pesetas) para cantar sobre el surrealismo con que ve la vida. Consagrado como reportero del Caiga quien caiga, Pablo hace la competencia a su jefe, El Gran Wyoming, que hoy mismo finaliza su tanda de conciertos en el Galileo Galilei (Galileo, 100; metro Argüelles; 22.15;1.000 y 1.500 pesetas) con su inseparable Reverendo.-

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_