Caja de Madrid inicia su expansión industrial con la compra del 3% de Telefónica
La Caja de Ahorros de Madrid ha adquirido el 3% del capital de Telefónica de España. La operación, que se ha fraguado durante los últimos tres meses, ha supuesto un desembolso de 102.000 millones de pesetas. El presidente de la entidad de ahorro, Miguel Blesa, intentará colocar al menos un representante en el consejo de administración de la empresa que encabeza Juan Villalonga. La caja no descarta alcanzar el 5% del capital de la compañía de telecomunicaciones, aunque sí rechaza entrar en el núcleo de accionistas estables junto al BBV, Argentaria y La Caixa
Miguel Blesa anunció al poco de llegar a dicho cargo que la caja tenía cerca de medio billón de pesetas para invertir en empresas industriales y de servicios. El primer paquete importante de ese dinero que tenía en el interbancano, sin apenas rentabilidad, lo ha destinado a comprar telefónicas. Todavía le quedan entre 350.000 y 400.000 millones para entrar en otras empresas.Caja Madrid ha esperado a tener el 3% de Telefónica para anunciar la compra masiva de acciones -lenta pero ininterrumpida- que ha realizado durante los últimos tres meses. Los 29 millones de acciones adquiridos en este tiempo por 102.000 millones de pesetas valen ahora 125.000 millones, es decir, ya cuenta con unas plusvalías latentes de 23.000 millones.
Amistad compartida
Miguel Blesa y Juan Villalonga comparten una estrecha amistad con el presidente del Gobierno, José María Aznar, lo que ha fomentado las relaciones entre ellos. Fue Aznar, además, el que les propuso para sus respectivos cargos. No obstante, fuentes oficiales de Caja Madrid aseguran que las compras de telefónicas no fueron comunicadas por Blesa a Villalonga hasta ayer por la mañana. Por la tarde, la operación fue debatida en el consejo, reunido hasta altas horas de noche.Los propósitos de la entidad de ahorro son seguir comprando hasta alcanzar el 5%, la misma participación que tienen cada uno de los miembros del núcleo duro de Telefónica (BBV, Argentaria y La Caixa). La caja, sin embargo, no pretende pertenecer a dicho núcleo de accionistas estables, según explicaron las fuentes del grupo.
Los tres miembros del núcleo duro tienen dos representantes cada uno en el consejo de Telefónica. A Blesa le gustaría tener al menos uno, porque, aunque no quiere entrar en ese núcleo, su objetivo es permenecer. Sin embargo, la empresa que preside Juan Villalonga cuenta ya con 18 consejeros, el número máximo admitido en los estatutos que la entidad estrenó tras su total privatización.
Incorporar a un consejero de Caja Madrid supondría modificar los estatutos o cambiar a alguno de los que están en la lista de los denominados independientes (un total de nueve). Fuentes de Telefónica manifestaron ayer que no conocían la posición de la presidencia, aunque el hecho de que no quiera entrar en el núcleo duro puede facilitar las cosas a Villalonga y no verse obligado a incorporar a un representante de la caja.
El objetivo principal de ésta radica en estar en una empresa rentable cuyo destino está en crecer a una media del 15% durante los próximos cuatro años, según los análisis de la caja.Además, el atractivo de Telefónica se concentra en "la fuerte diversificación de la compañía en productos y mercados frente a otros operadores, el incremento del número de líneas, el fuerte desarrollo de la telefonía móvil, la expansión de Telefónica Internacional y la alianza con BTMCI y Portugal Telecom, así como la apuesta por el desarrollo de proyectos Multimedia".
Otro de los objetivos confesados de Caja Madrid es entrar en el negocio bancario de Telefónica.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.