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Entrevista:

"Barajas está en mantillas"

Lleva seis años gobernando la capital en cómoda mayoría. Reconoce que Madrid tiene algunos de los servicios más caros del país. Alguno, como el de la funeraria, le pesa. Otros, como las altas tarifas de la grúa, le alegran, porque disuaden. Álvarez del Manzano admite el coste político que supuso el fiasco de la privatización de la notificación de las multas y sobre el futuro de Barajas no tiene dudas: cinco pistas, sí; un segundo aeropuerto en Campo Real, no.

José María Álvarez del Manzano, de 59 años, atravesará la próxima semana el ecuador de su segundo mandato al frente del Ayuntamiento de Madrid. En dos años, el gobierno local, en colaboración con la Comunidad, ha puesto la ciudad patas arriba. Tantas obras sufren los madrileños que el propio alcalde considera que, por ahora, no cabe ninguna más. La entrevista transcurre al mediodía del viernes con un triste telón de fondo: el aumento de la tensión en los poblados chabolistas a consecuencia del cerco antidroga realizado por la Policía Nacional. Unas horas antes, 300 drogodependientes se habían enfrentado a las fuerzas de seguridad tras la trágica muerte, atropellados, de dos toxicómanos.Pregunta. ¿Qué opina de estos sucesos y de la explosión de ira vecinal de Villaverde?

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Respuesta. Me preocupan especialmente las manifestaciones por problemas de inseguridad. Pero la manifestación de Villaverde no es espontánea. Hay un cierto interés en impulsarla por alguien que quiere acentuar lo negativo. Eso no quiere decir que los vecinos no tengan razón en pedir que los puntos de droga se trasladen. El problema está en que nadie quiere recibirlos. Lo que tenemos que conseguir es que se suprima la droga. Habrá que cerrar las fronteras, hacer una vigilancia especial. No puedo luchar solo contra la droga.

P. La solución parcial que ofrecen algunas instituciones es facilitar metadona como sustitutivo. ¿Es partidario de ello?

R. Sí, y he comentado al delegado del Gobierno que tenemos que hacer una distribución más general de metadona, no sólo en puntos concretos.

P. ¿A través, por ejemplo, de los centros municipales de atención a drogodependientes?

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R. Depende de lo que la Comunidad quiera, que es la competente. Pero la metadona es un remedio provisional. Lo que hay que conseguir es que la gente deje de consumir. No sólo tenemos que atender al drogadicto irrecuperable, sino procurar que no haya más, y para ello hay que prevenir y disuadir, y ahí está la policía. Además, el Código Penal se equivocó al autorizar la droga para consumo propio. Tenemos que prohibir cualquier uso de la droga.

P. Algunos de los poblados de realojamiento se han convertido en nuevos hipermercados de la droga.

R. Pero eso no lo fomento yo, que dije que no había que dar vivienda a un señor que vive en una chabola y tiene un Mercedes en la puerta. Tiene que haber una labor investigadora de los chabolistas, que hay muy pocos en Madrid. Yo no puedo negar alojamiento a las personas que vivan en malas condiciones, pero hagamos un esfuerzo por depurar a las personas dignas y a las indignas.

P. La Comunidad apuesta por el reciclado de la basura [el Jueves aprobó el Plan de Residuos Sólidos] y rechaza, por el momento, la incineración. El Ayuntamiento va en dirección contraria.

R. Yo no me meto en lo que hacen los demás, pero algunos municipios deberían pensar en la incineración, que es lo que se recomienda en todo el mundo.

P. Los vecinos de la región separarán la basura en (los cubos desde el 1 de enero. En Madrid capital, eso ocurrirá en el 2025.

R. Nosotros estamos haciendo un ensayo. El plan lo aplicaremos en la medida que sea conveniente.

P. ¿La escombrera ilegal de Las Cárcavas se consiente por el interés general?

R. Las Cárcavas es un ejemplo de sentido común en una ciudad que sin vertedero se hubiera parado.

P. Entonces, ¿el Ayuntamiento dará la cara por los propietarios del vertedero, a los que un juez imputa un delito ecológico?

R. Doy la cara por la autorización para verter allí. Es una necesidad de esta ciudad. Las obras del metro se pararían sin el vertedero. Además, sobre las escombreras siempre surge algo maravilloso, como el parque del Oeste.

P. Pero carece de licencia.

R. Eso es otra cosa. Pero no nos debemos parar por ello. Si alguien no ha hecho las cosas bien, ya lo veremos. Pero no voy a parar Madrid por una disposición administrativa.

P. ¿Cuánto ha costado el fiasco de EDS, la empresa privada a la que se adjudicó la gestión de las multas?

R. Lo comido por lo servido. Pero hemos conseguido una cosa: que Correos haga después de EDS lo que no quería hacer antes. Con toda la pelea, las multas se pagan como nunca.

P. ¿Y el coste político?

R. Mucho. Hemos dado una mala sensación ante los ciudadanos en algo indispensable como el cobro de multas. Pero la opinión pública pide arreglar el tráfico y luego se pone del lado del que no paga las multas.

P. El Tribunal de Cuentas demuestra que la privatización de la funeraria fue un chollo, pues se vendió por un precio muy inferior a su valor real.

R. El tribunal no ha tenido en cuenta muchas cosas, y cuando lo haga tendrá que cambiar su informe.

P. Ha tenido mala suerte con ese tribunal, ya que también criticó el despilfarro de la capitalidad cultural de Madrid en 1992.

R. Estoy encantado si después de manejar dos billones de pesetas en seis años lo que se discute son apreciaciones de procedimiento, no delitos, ni que falte dinero. Estoy muy tranquilo.

P. ¿Por qué es tan caro morirse en Madrid?

R. Porque en Madrid los servicios son más caros en todo y porque la funeraria ofrece una calidad que difícilmente se encuentra en España. Pero tiene usted razón, son muy caros. Y hemos evitado que lo fueran más, porque cuando entraron los privados pidieron una elevación de las tarifas que yo congelé.

P. ¿Cómo está la Ley de Capitalidad?

R. Parada en mi despacho a la espera del Pacto Local que impulsamos la siete grandes ciudades españolas y que ha prometido José María Aznar. Es un paso previo a la Ley de Capitalidad.

P. ¿Y si el Pacto Local no atribuye las competencias sobre el urbanismo a los ayuntamientos, como usted persigue?

R. Si el Pacto Local no altera las competencias que ahora tienen atribuidas las comunidades yo no lucharé con Alberto Ruiz-Gallardón por algo que no me atribuye la ley.

P. ¿Qué debería establecer el Pacto Local sobre urbanismo?

R. Que las competencias dentro del perímetro municipal corresponden a los ayuntamientos y que la administración superior debe coordinar las líneas de conontación entre municipios.

P. Es decir, en la Operación Chamartín [plan para cubrir las vías de la estación y levantar 10.000 viviendas] no debería estar la Comunidad.

R. No debería, aunque a mí no me importa que esté. Un colaborador más. Mejor, así todos aportamos energía y dinero.

P. Los alcaldes de Getafe y Rivas le acusan de ser un mal vecino por instalar los vertederos y la incineradora junto a ellos.

R. Yo debo defender los intereses de Madrid por encima de otros. Getafe quería que el próximo vertedero estuviera en Fuencarral, pero las tres empresas que se han presentado al concurso han elegido Vallecas.

P. Alcobendas y Coslada se quejan de su idea de meter cinco pistas en Barajas.

R. Porque piensan en los intereses limitados de sus municipios y yo, en los de España. Madrid debe convertirse en la puerta de América y de África en Europa.

P. ¿No puede estar esa puerta aérea en Campo Real?

R. No sirve. Sería perder de 15 a 20 años y desperdiciar esa opción. Sólo admito en contra de la ampliación de Barajas dos argumentos: que sea imposible sobrevolar algunas zonas o que hubiera deterioro ecológico.P. Pero hubo un momento en que ustedes borraron del Plan General la reserva de suelo para nuevas pistas.

R. Fue un error en contra de mi opinión.

P. ¿Iberia no presionó para la rectificación posterior?

R. Yo no defiendo los interea ses de Iberia, sino los de España. Pero es cierto que Iberia saldría favorecida, porque Barajas debería empezar a tener terminales por compañías, como los grandes aeropuertos. Iberia se merece una terminal propia, pero Barajas está en mantillas.

P. ¿Por qué no batalló cuando el Gobierno rebajó de un 15% a un 10% la cesión de suelo a los municipios?

R. Porque debemos ser honestos. Yo le llamé impuesto revolucionario cuando se estableció con Eduardo Mangada [consejero socialista de Joaquín Leguina]. Aunque reconozco que, una vez de alcalde, me vino muy bien. Gracias a eso conseguimos suelo para viviendas sociales. Los ayuntamientos no podemos expropiar. No tenemos dinero. Moralmente creo que el 15% era un privilegio excesivo.

P. Se puede decir entonces que muchas de las casas baratas que usted ha hecho son gracias a Mangada.

R. No necesariamente. El Gobierno socialista tuvo la misma oportunidad y no la aprovechó.

P. Madrid tiene la grúa más cara de España.

R. Sí. 17.000 pesetas, una barbaridad [se ríe]. La grúa debe ser disuasoria. El que aparca mal lo hace por comodidad, porque hay sitio en los aparcamientos.

P. ¿Y es justa?

R. Me indigno cada vez que veo que el coche que se ha llevado la grúa es el más cómodo de retirar y no el que estaba peor aparcado. En ocasiones ocurre.

P. ¿No se puede graduar la ordenanza para castigar al coche peor aparcado?

R. Lo he intentado, pero es imposible. También es injusto que cuando hay un acto oficial se retiren coches bien aparcados y luego se les cobre la grúa.

P. ¿Por qué no lo arregla?

R. Ya he dado instrucciones para estimar esos recursos.

P. Los aparcamientos para residentes no se llenan.

R. Eso va a cambiar. No se autorizará un sólo aparcamiento sin la lista completa de las personas interesadas en ellos.

P. ¿El tráfico va bien?

R. El tráfico va bien excepto cuando hay obras o manifestaciones. En Londres, por ejemplo, han prohibido las manifestaciones entre semana y los recorridos hay que negociarlos con el alcalde. Voy a proponérselo al delegado del Gobierno [ironiza].

P. La reforma de Malasaña no ha acabado con el ruido y la suciedad del barrio.

R. No puede ser que se haga una operación urbanística de primera categoría y después la zona se degrade así. Pero la solución no es meter allí a la policía, sino la educación que los padres dan a sus hijos. También estoy cerrando establecimientos que venden bebidas a los chavales.

P. ¿Qué proyectos le quedan para los dos próximos años?

R. No faltan ideas ni proyectos, pero sí dinero y oportunidades.

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