"No se enseña a ver televisión en los colegios"
Aunque nació y se crió en Siles (Jaén), Pilar Aguilar presume de haber aprendido a leer dos veces, y de forma tardía. La primera, cuando tenía ocho años. Una enfermedad aconsejó traerla a Madrid, a casa de unos tíos. "Venía del pueblo y me aburría en. una ciudad sin campos por donde correr ni árboles a los que subirme. Me regalaron libros y comencé a leer". Mucho después descubrió otro lenguaje no menos fascinante el audiovisual: en la Universidad de París 5, donde estudió Ciencias Cinematográficas. Hace seis años volvió a España y se instaló en la calle del Desengaño, en pleno centro de Madrid. Ahora, la editorial Fundamentos publica su Manual del espectador inteligente, un libro reflexivo y práctico que ha escrito para ayudar a los demás a que disfruten más del cine y de la televisión. Desde una óptica sarcástica y corrosiva, esta profesora de francés se ha pro puesto mostrarnos cómo se construyen las imágenes en movimiento y dónde reside el poder de su belleza y de su persuasión.Pregunta. ¿Quién es el es pectador inteligente?
Respuesta. El que conoce suficientemente los mecanismos del lenguaje audiovísual para poder obtener más placer de la televisión y una mayor capacidad de discriminación de lo que le disgusta.
P. ¿Somos analfabetos tele visivos?
R. Naturalmente. A pesar de la presencia tan fuerte que tiene este medio en un mundo en el que la imagen prevalece sobre el resto de las cosas 10 se conoce cómo funciona su lenguaje ni los códigos de elaboración de imágenes. Por eso para el gran público la televisión es una pasión insatisfecha.
P. ¿Cómo habría entonces que ver la televisión?
R. Primero, con una cierta formación audiovisual para poder convivir con ella. Y luego, rechazando lo que tiene de vulgar y disfrutando lo mucho de bueno que ofrece.
P. ¿Tenemos la programación que nos merecemos?
R. En cierta manera sí, porque responde a los gustos de nuestra sociedad. Pero el sistema de audiencias es injusto, porque no manda la mayoría, sino un grupo minoritario formado sólo por el 30% de los espectadores. Pero es un grupo con gustos unificados que se impone al 70% restante de la población, pero que es muy heterogéneo en sus gustos.
P. ¿Se enseña a ver televisión en los colegios?
R. No. Y es una incongruencia que el sistema educativo se desentienda de un medio tan presente e importante en nuestras vidas y al que dedicamos casi cuatro horas diarias de media.
R. Se debería reequilibrar el tiempo de ocio, porque la sociedad casi te obliga a recluirte en casa a-ver la tele.
Manual del espectador inteligente.Editorial Fundamentos. Precio 1.500 pesetas.
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