El 'circo' del tablero.
El torneo de ajedrez Comunidad de Madrid atrae a centenares de aficionados y curiosos
La lluvia les traía al fresco. Los 700 aficionados -la mayor parte hombres- que llenaron ayer el Auditorio de la ONCE disfrutaron durante seis horas de la pasión del ajedrez, convertido, con motivo del torneo Comunidad de Madrid, en un espectáculo vibrante gracias ala electrónica y los peculiares comentarios que caracterizan la retransmisión de las partidas:"¡Qué cañón, qué torpedo, ese peoncillo de Veselín Cuidadín Topálov es mortal' de necesidad para Judit Polgar! Ése es el peculiar estilo de locución del gran maestro Félix Izeta, cuyos comentarios llegan al público a través de auriculares.En el patio de butacas hay que guardar un silencio sepulcral para no molestar a los diez gladiadores de la mente que se enfrentan en el escenario. Nadie parece aburrirse; además de esforzarse en no emitir carcajadas por los chistes de Izeta -que combina los análisis técnicos con chascarrillos que aluden a la vida privada de una jugadora como "A los 20 años, Judit no tiene novio. Pero se la ve muy feliz"-, los espectadores siguen las cinco partidas en tableros electrónicos gigantes y ven primeros planos de sus ídolos en un circuito cerrado de televisión.
Los que quieren profundizar en la técnica van a una sala aneja para escuchar los análisis del gran maestro José Luis Fernández. Otros discuten por los pasillos -donde se oyen frases del tipo "¡No seas burro; alfil a g5 no vale porque pierdes la dama! "- u observan la curiosa exposición Esquizofrenia Chess, del canario Gregorio Hernández.
Entre ellos está Francisco Herranz, que disfruta más del cotilleo que de los análisis: "Me gusta este silencio cargado de tensión. A veces no puedes conversar con un amigo por que está totalmente concentrado en una partida. Las horas pasan volando, y cuando llego a casa estudio las partidas con mi ordenador". Jorge Morales, artífice de la parafernalia electrónica del circo del tablero, quedó encantado al descubrir el mundo del deporte mental: "Los ajedrecistas son individuos peculiares, cultos y con pasión guerrera. Buscan la verdad y no aplauden a su favorito, como en el fútbol, sino a quien produce belleza".
Algunos han atravesado media España para estar aquí. Leandro Ganzábal, profesor de Informática en Vitoria, es uno de ellos: "Disfruto mucho en este ambiente. Me encanta ver de cerca a artistas geniales como el español Alexéi Shirov [10º del mundo, nacionalizado en 19961", dice sin quitar el ojo de las pantallas.
Ajedrez. Torneo Comunidad. Hasta el día 1, excepto el 28, desde las 15.30. Auditorio de la ONCE, paseo de La Habana 208. Gratuito. EL PAíS DIGITAL.http://www.elpais.es
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