Hierro cumple 50 partidos

La suma de unos cuantos elementos permiten situarle a priori como el protagonista del partido: cumple su encuentro 50º con la selección, sus compañeros le han nombrado mejor jugador español, marcó el tanto decisivo del último duelo a todo o nada de una fase de clasificación, fue el gran ausente en el choque de Valencia ante Yugoslavia... Es Fernando Hierro, un tipo que construye su trayectoria con naturalidad como si nada pasara.El malagueño lleva tiempo obligado a cambiar semanalmente de posición: en el Madrid, a la defensa; en la selección, al medio centro. Al principio, Hierro proclamaba abiertamente que le gustaba más actuar de centrocampista, pero ya no sabe realmente dónde se encuentra más cómodo: "Total, no varía tanto. De central a medio centro hay 10 metros".

Fernando Hierro no tiene ninguna duda de ser antes "un futbolista de entrenador" que "de grada". Y lo justifica: "Por las posibilidades que les doy, cualquier entrenador estaría a gusto conmigo. Estoy superconvencido. No soy de hacer cosas geniales, porque no me tienta la idea. Por mi forma de ver esto me gusta jugar simple y fácil. Pero, sobre todo, a mí me gusta ganar".

No se toma la cita de hoy como algo determinante, ni por clasificación ni por imagen. "Llevamos tres años sin perder", añade, "demostrando que es tamos preparados para los grandes partidos y la gente todavía nos espera para, si pinchamos, decir "ves, con los grandes no pueden". Aún nos falta el último empujón, el título de un gran campeonato, pero so mos un magnífico equipo. Antes y ahora".