Arzalluz afirma que el ministro del Interior faltó a la verdad al informar de la detención del etarra Elejalde

El presidente del PNV, Xabier Arzalluz, afirmó ayer que los testimonios aportados por el portavoz de su partido, Joseba Egibar, en el caso de las supuestas torturas al activista Fernando Elejalde demuestran que el ministro del Interior, Jaime Mayor, "no ha dicho la verdad". En declaraciones a la emisora Euskadi Irratia, el dirigente nacionalista vasco dio por confirmada la teoría de que Fernando Elejalde no sufrió "grandes lesiones" en el momento de su detención. "Las lesiones se produjeron en otro momento", indicó Arzalluz, para añadir que el ministro de Interior, Jaime Mayor, debe aclarar si estuvo bien informado en este asunto. "Si estuvo mal informado, se deben depurar responsabilidades y, si estuvo bien informado, él tendrá que decir por qué no dijo la verdad", señaló.El juez instructor del caso, Justo Rodríguez, ha solicitado al Colegio de Abogados de San Sebastián una carta en la que la letrada que asistió de oficio al detenido describe el estado en que encontró a Elejalde. "Tiene la cara llena de hematomas y los ojos totalmente amoratados, incluso golpes de sangre en el globo ocular. En el curso de la declaración observo que se palpa la zona lumbar, cabeza y oído con muestra de dolor", escribió la abogada. En el mismo escrito, la letrada afirma que el detenido le indicó que los golpes "se los habían hecho allí mismo, refiriéndose a la comisaría". La carta será analizada la próxima semana por la Junta de Gobierno de ese colegio profesional.

En el sumario instruido hasta ahora, que consta de más de 400 folios, figuran los testimonios de los tres policías, dos hombres y una mujer, que presenciaron el asesinato del psicólogo de la prisión de Martutene, según fuentes jurídicas consultadas por este periódico. La versión de los dos agentes que pocos minutos después acorralaron y redujeron a Fernando Elejalde sostiene que la detención fue muy rápida y violenta, que el detenido mantuvo en todo momento el arma en su mano y que consiguieron reducirle en el suelo. No precisan qué tipo de golpes le propinaron.

En todas sus declaraciones, Fernando Elejalde manifiesta que las lesiones se las produjeron los policías en la comisaría de San Sebastián durante las dos horas siguientes a su detención, antes de ser trasladado a la casa de socorro. Dice que en la huida chocó con un coche en marcha aunque indica que el golpe no tuvo consecuencias.

Gómez de Liaño llegó a la conclusión de que no se habían producido malos tratos a la vista de estos testimonios y de los informes, puramente descriptivos, elaborados por los forenses de la Audiencia y por los médicos del hospital donostiarra. Algunos de los policías de la comisaría donostiarra sostienen que fue el propio detenido quien les indicó que durante la huida se había golpeado con un coche.

Al sumario han sido igualmente incorporadas las versiones de las dos personas que viajaban en el coche contra el que chocó el detenido. Según el conductor, no hubo propiamente un golpe y el coche estaba parado en ese momento, mientras que su acompañante considera que el golpe fue fuerte. Figuran igualmente las declaraciones de varias personas, entre ellas el diputado general de Guipúzcoa, Román Sudupe, que atribuyen al delegado del Gobierno central, Enrique Villar, la frase "Elejalde ha empezado a hablar".