Carlos Gurméndez
El 10 de diciembre de 1991, Carlos Gurméndez publicó un artículo que amistosamente me dedicaba. Los amores silenciosos fue el fruto de una carta que le envié sugiriéndole ese concepto que él trataría tan maravillosamente en dicho artículo.Recientemente leí la noticia de su fallecimiento, entonces se produjo en mí una grieta de tristeza, la grieta de saber que no volvería a abrir el periódico viendo su nombre, devorando a continuación toda la frescura de sus escritos.
No puedo menos que ofrecerle este pequeño homenaje: descubrir mi emoción a la persona que me acercó al poeta de la muerte:
"Esta tarde llueve, como nunca; y no / tengo ganas de vivir, corazón" (César Vallejo).-
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