Jóvenes contra la Intolerencia cree que el procesado "miente"

El presidente de la Asociación Jóvenes contra la Intolerancia, Esteban Ibarra, destacó al final del juicio: "Se ha visto claramente, a juzgar por las contradicciones en que ha incurrido, que fue él quien dio la puñalada mortal a Richard y que miente al acusar del crimen a David García [portero del bar frente al que se produjo la agresión]". "Conforme iba avanzando el interrogatorio, El Mallorquín se ha ido desdiciendo de sus declaraciones ante la policía y los jueces instructores del caso", dijo Ibarra. "Me ha llamado la atención su actitud altanera y soberbia. Es un mentiroso andante", sostuvo Ibarra.

Por su parte, el abogado de El Mallorquín, Javier Saavedra, comentó al final del interrogatorio: "Mi defendido ha mantenido la misma versión desde que se propuso contar la verdad de lo sucedido, en julio de 1995 [en esa fecha se levantó el secreto que pesaba sobre el sumario]. Y ésta es que fue David García, portero del bar Donqui, el autor de la cuchillada que causó la muerte de Ricardo".

Saavedra explicó que, aunque la acusación contra su cliente es muy grave, éste tiene derecho a ser defendido y a que se considere su presunción de inocencia. "Las contradicciones en las que ha caído son típicas de su bajo nivel cultural. Estoy convencido de que los peritos van a confirmar su versión", afirmó.

El abogado que ejerce la acusación popular en nombre de la Asociación Jóvenes contra la Intolerencia, Carlos Aguilar, abundó, al término del juicio, en "las muchas contradicciones" en que a su juicio ha incurrido el Mallorquín. "Ha sido muy poco sincero", enfatizó.

La madre del Ricardo Rodríguez, Maribel García, rehusó hacer declaraciones sobre el desarrollo de la primera jornada del juicio. No obstante, criticó la falta de previsión de la sala Primera de la Audiencia Provincial. El juicio comenzó con casi tres horas de retraso sobre el horario previsto porque la sala en la que inicialmente se iba a celebrar no reunía condiciones -es pequeña y las columnas que hay en su interior dificultaban la visión de los acusados- y el tribunal optó por cambiarse a otra.

"Imprevisión"

"Parece mentira que después de tanto tiempo transcurrido desde la muerte de mi hijo se haya tenido que retrasar el comienzo del juicio tres horas por no haber espacio suficiente en la sala prevista", señaló.Al final del juicio, dos de los inculpados, amigos de El Mallorquín (Félix Francisco Chaves y Antonio Bronchalo) comentaron que ellos se vieron envueltos en la reyerta que causó la muerte a Ricardo "de forma accidental".