Abogados de Barcelona critican las sentencias sobre tráfico de drogas

La Comisión de Drogas del Colegio de Abogados de Barcelona considera que la aplicación que la jurisprudencia hace del Código Penal no sólo no ayuda a combatir eficazmente él tráfico de drogas, sino que en muchos casos resulta contraproducente e incluso favorece el tráfico a gran escala. Así lo indicaron ayer tres miembros de esta comisión, quienes criticaron que el Tribunal Supremo no distinga entre el pequeño comercio para costear el consumo propio y el tráfico a gran escala.

Rosa Paino, presidenta de la comisión, criticó la jurisprudencia que está sentando el Tribunal Supremo al considerar que las cantidades de "notoria importancia" que fija el artículo 346 del Código Penal se producen a partir de 60 gramos de heroína, de 120 gramos de cocaína y de un kilo de hachís. Estas reflexiones fueron realizadas ayer en la presentación de las jornadas sobre drogas que se celebrarán el viernes y sábado bajo el lema Drogas: 20 años después.La abogada diferenció entre la persona que trafica para costear su adicción y los grandes traficantes. "El nuevo Código Penal está premiando la actuación de los grandes narcotraficantes", aseguró Paino. La comisión considera necesario establecer grados, puesto que en la actual interpretación, una vez que se superan las cantidades indicadas, la misma pena merece traficar con dos kilos que con dos toneladas.

Una de las consecuencias de ello es que la proporción de presos acusados de tráfico de drogas no deja de aumentar. Así lo demuestran las estadísticas obtenidas en las cárceles catalanas: la población reclusa encarcelada por tráfico de drogas se ha multiplicado por nueve en los últimos 12 años. La Comisión de Drogas considera que esa cifra evidencia un cambio de actitud de los delincuentes y constata "el fracaso absoluto del aparato judicial para combatir esa realidad".

Rosa Paino recordó que el 1 de enero de 1984 la población reclusa catalana, entre penados y preventivos, era de 1.607 personas, de las cuales sólo 54 estaban relacionadas con el tráfico de drogas, y que el 1 de enero de 1996 había 6.344 presos, de los que 1.680 lo estaban por tráfico de drogas.

Paino considera que a pesar de que los delitos contra la propiedad siguen siendo los más frecuentes, "entrañan más peligro para quien los comete", porque es más fácil ser identificado. De ahí que vayan aumentando los delitos por tráfico de drogas pese a lo que definió como "política represiva y condenas elevadas".

La Comisión de Drogas reclama la modificación del actual Cógido Penal y critica algunos proyectos legislativos del Gobierno, como el que prevé la posibilidad de que los policías se infiltren en bandas de narcotraficantes. "Esto nos da mucho miedo, porque si sale adelante esa ley, dejará de haber guardias civiles y policías implicados en tráfico de drogas porque se nos dirá que estaban de servicio", dijo el letrado Francesc Xavier Gràcia.

Los abogados de la Comisión de Drogas criticaron también la actitud que mantiene la fiscalía en los juicios contra algunos narcotraficantes, a los que les rebaja la petición de pena a cambio de que reconozcan su autoría en los hechos.